La piel es la capa principal que protege a la persona del medio exterior y el cuidarla desde temprana edad es un requisito primordial para lograr una salud plena hasta la vejez. Sin embargo, la intensa radiación ultravioleta, el clima y la falta de conocimiento para su protección, originan la aparición del cáncer, cuyas cifras van en aumento en Lambayeque.
El dermatólogo Winston Maldonado Gómez, del Hospital Regional Lambayeque, señala que la patología más frecuente de encontrar es la Dermatitis Atópica – DA, en niños, debido a los casos concurridos de alergias que se dan por la falta de educación en salud.
Menciona que los pacientes alérgicos son quienes tienden a poseer mayor resequedad en la piel, causa principal para la aparición de la DA, ya que al no contener la capa grasosa que la protege ante las sustancias que podrían irritarla, existe una mayor predisposición a padecerla.
“La dermatitis atópica se debe controlar a tiempo, porque esta se asocia a una serie de enfermedades y, sobre todo, al asma y la rinitis. Algunos consideran que la atopía es la que tiende a comenzar con la dermatitis, prosigue con el asma y al final con la rinitis. Hay personas que producen las tres, otras dos o solo una. Cuando un niño presenta una dermatitis atópica severa tempranamente se debe tener un mayor cuidado porque puede ir hacia otras enfermedades más graves”, advierte.
El dermatólogo expone que los síntomas más frecuentes son las lesiones rojas intensas en la piel, la necesidad del niño en rascarse frecuentemente, y la resequedad, factor principal de la patología, por ello recomienda la humectación diaria, además de utilizar sustancias antiinflamatorias.
“Lo que siempre se le debería indicar a los padres de familia es que no utilicen cualquier tipo de jabón, ya que estos deben ser cremosos y naturales como son los de avena y glicerina, mas no usar jabones germicidas, ya que tienden a tener mucho detergente que irrita la piel. Otro aspecto es que los baños no pueden ser prolongados. A veces los niños quieren estar media hora hasta 40 minutos en la ducha, pero en estos casos deben estar máximo unos diez minutos, y no utilizar agua caliente, ya que genera mayor resequedad”, puntualiza.
Winston Maldonado manifiesta que controlar la DA a través de una dieta es un tema de controversia, ya que, según algunos estudios médicos, alimentar al niño a temprana edad con huevo y pescado sí origina la presencia de resequedad en la piel, pero no está confirmado científicamente que sea al cien por ciento. Asimismo, algunos estudios señalan que los niños que están expuestos a personas que sufren de tabaquismo, o están expuestos al humo de la leña que se utiliza para cocinar en algunas casas, son factores que originan la patología, pero aún no está comprobado.
ADOLESCENTES
Maldonado Gómez indica que el acné es la patología más frecuente en los adolescentes, debido a que los pacientes sufren incidencias a consecuencia de los cambios hormonales que surgen entre los 12 y los 25 años aproximadamente, generando reacciones en el rostro como erupciones, inflamaciones y espinillas, que al ser manipuladas con agresividad o por factores agravantes tales como el estrés y la ansiedad, dejan lesiones intensas y grandes, ocasionando cicatrices.
“Cuando se presenta el acné con mayor intensidad observamos agresiones más rojas, dolorosas, grandes y profundas. El acné bien manejado por un especialista es fácilmente controlable. Lo peor que puede hacer un paciente es manipular las lesiones, es decir apretar las erupciones e intentar drenar los granos, porque tienden a inflamarlos más”, remarca.
El dermatólogo explica que existen tres tipos de acné: el que solo se presenta con espinillas, que se puede controlar con cremas; el que es más inflamatorio, para el cual se necesita de antibióticos, y, por último, el acné quístico, en el que se debe realizar un tratamiento con retinoide, compuesto químico que ayuda a regenerar la piel ya que contiene vitamina A, con estricto seguimiento por parte del especialista.
“El acné tiende a ceder alrededor de los 25 años, entonces el tema es que durante el tiempo que se presente se debe realizar el menor daño posible. Cuando queda el registro de las lesiones en el rostro se pueden emplear diferentes tratamientos como el peeling y el láser, que de manera general tienen el mismo mecanismo, porque ya sea mediante una agresión física o química, estimulan el cambio celular y atenúan las cicatrices. En el caso de las mujeres, cuando tienen una edad mayor de 25 años, se debe pensar en la posibilidad de ovario poliquístico, es decir, que la presencia de granos a esa edad es un indicador de que sufren de quistes”, resalta.
Por ende, Winston Maldonado recomienda que al presentarse el acné, es necesario evitar la manipulación de este y visitar a un especialista para el tratamiento de control de acuerdo al caso que se presente, agregando que “a pesar que existan tratamientos tradicionales que pueden funcionar con los grados de acné leve, cuando se trata de acnés inflamatorios o quísticos se necesita de un tratamiento farmacológico recetado”.
ADULTO MAYOR
El dermatólogo explica que los adultos mayores tienden a presentar cáncer en la piel debido a la exposición prolongada de radiación ultravioleta, la cual produce mutaciones en los núcleos de la piel, siendo las personas de tez blanca las de mayor predisposición a padecerlas en la vejez.
“El problema es que el cáncer debería prevenirse y esto no se realiza. Se debe cuidar la piel con la utilización del protector solar, de preferencia medicado, cada dos o tres horas, porque ese es el período de efecto del producto, diariamente e incluso en el interior de la casa. Ese es el principal requisito de prevención. En el caso de los pacientes de mayor edad que presentan alguna lesión nueva es preferible realizar una evaluación para descartar la posibilidad de presentarla”, señala.
Anota que el problema del cáncer es cuando se realiza metástasis con facilidad, es decir, que se puede diseminar hacia otros órganos como el páncreas, el hígado o el cerebro, por lo que es recomendable visitar al especialista cada vez que se presente una nueva zona pigmentada de color obscuro y de diámetros deformes.
“Para evaluar las características se utiliza el ABCDE, que es la medida la cual se emplea para diferenciar las lesiones malignas. La ‘A’ refiere a asimetría, la ‘B’ a los bordes irregulares de la lesión, la ‘C’ al color no homogéneo que se presente, la ‘D’ al diámetro superior a seis milímetros y, por último, la ‘E’ de evolución de la lesión”, expone.
Agrega que existe una gran diversidad de tratamientos para el cáncer de piel, siendo la más común la cirugía. Sin embargo, señala que ahora el nuevo mecanismo que emplean desde el hospital es el tratamiento por crioterapia.
“La crioterapia es una crio cirugía en la que se emplea un nitrógeno líquido, que es un gas que se encuentra a menos de 196°, y que a través de la congelación de la lesión se genera una construcción de los vasos creando necrosis del tumor. Para un paciente mayor de 80 años, es un tratamiento más eficiente, ya que el procedimiento para acudir a una cirugía debe pasar por diferentes exámenes aprobatorios y demora en su atención. Además, se regula al paciente cada tres semanas para ver la posibilidad de repetir el tratamiento”, indica.
HONGOS Y MELANOMAS
Maldonado Gómez menciona que las urticarias es otro de los casos patológicos frecuentes en Lambayeque, que son independientes de la edad y son causadas por el consumo de ciertos alimentos, y a veces llegan a ser crónicas. Asimismo, las infecciones por hongo, es decir, micosis, es otra de las enfermedades con mayor presencia en los pacientes atendidos.
“El principal factor es que vivimos en una zona de mucho calor y tendemos a sudar mucho, y esto favorece a una mayor aparición de hongos. Esto también se presenta en el cuero cabelludo, si se ve descamación en un niño o adulto lo que se tiene que hacer es llevarlo al dermatólogo. Lo primero que pensamos es que sea caspa, pero puede ser una patología de tiña. A través de una evaluación se diferencia si es caspa o no, en el que se pueden observar en el cabello cambios como en la formación de lesiones alopécicas, es decir sin pelo, descamación, hasta incluso pus cuando está inflamado. Estás también se pueden presentar al nivel de la ingle, zona genital o en el cuerpo”, explica.
Por otro lado, expone que el melanoma es el cáncer de lesiones pigmentadas que tiende a generar metástasis, es decir, la extensión de un tumor. “Es el cáncer más riesgoso y con importante presencia en los pacientes, debido a que las personas mayores no asisten periódicamente a un especialista para la revisión de lunares”, indica.
“La mayoría de las células del melanoma continúan produciendo melanina, de modo que los tumores de este tipo usualmente son de color café o negro. Sin embargo, algunos melanomas no producen melanina y pueden lucir color rosado, café o incluso blanco. Pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero son más propensos a comenzar en el tronco, pecho y espalda del hombre y en las piernas de las mujeres. El cuello y el rostro son otros sitios comunes”, señala.
Menciona también que tener una piel con pigmentación oscura disminuye su riesgo en los lugares más comunes, aunque cualquier persona puede desarrollar este tipo de cáncer en las palmas de las manos, las plantas de los pies y debajo de las uñas, cuyo tratamiento es directamente con un especialista.
AUTOEXAMEN DE LUNARES
El dermatólogo señala que el primer paso es examinar el cuerpo de frente y de espalda, al igual que el lado derecho e izquierdo, con los brazos elevados. De esta forma, se verifica las zonas más visibles y predispuestas a sufrir las lesiones malignas.
Luego, doblar los codos y mirarse los antebrazos y palmas de las manos. Winston Maldonado menciona que en gran número de pacientes las melanomas se ubican en las palmas de las manos, por ser estas las más expuestas a los factores dañinos medioambientales de Lambayeque.
El galeno recomienda también revisar la parte posterior de las piernas y pies, entre los espacios de los dedos al igual que las plantas, debido a que estás son también zonas frecuentemente afectadas.
Por último, examinar la parte posterior del cuello y el cuero cabelludo, además de la espalda y glúteos, ya que incluso estas zonas son sensibles ante las agresiones, lo cual produce resequedad, infecciones, y la aparición de lunares.
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