En su momento, Carlos Peña Reluz fue el máximo dirigente de los agricultores del Perú al presidir la Junta Nacional de Usuarios de los Distritos del Riego. Esa vinculación con el agro, que empezó a los 11 años cuando ingresó como trabajador de la excooperativa Pomalca, lo lleva a plantear una serie de iniciativas legislativas para reivindicar al sector del que depende la soberanía alimentaria del país.
Peña Reluz, candidato al Congreso de la República por Podemos por el Progreso del Perú, con el N° 3 en la lista de Lambayeque, fue también presidente de la Comisión de Regantes de Jayanca y de la Junta de Usuarios del Valle La Leche, por lo que – asegura – conoce de cerca, como abogado y agricultor – la problemática agraria, la misma que no ha recibido la debida atención del Estado.
“No olvidemos que el pequeño agricultor es el que trabaja y labra la tierra para producir el alimento que da la garantía a más de 30 millones de peruanos. Los hermanos agricultores exportadores son los que venden al extranjero, son los que generan divisas. Es muy cierto, cuando el gobierno dice que hemos exportado por 80 mil millones de dólares, pero quienes exportan son los que tienen mediana agricultura, riego tecnificado y ganancias. Nosotros, los pequeños agricultores, que carecemos una política de comercialización y cultivo, estamos realmente desamparados”, señala.
ATENCIÓN AL AGRO
El candidato remarca que esta situación se presenta en el país pese a que la Constitución Política del Perú indica en el artículo 88 que los gobiernos tienen la obligación de promover el desarrollo del agro nacional.
“Sin embargo, esta figura nunca se da y siempre seguimos en el abandono y en el retraso, por eso es que he decidido postular al Congreso de la República, para llevar hasta el seno del primer poder del Estado la voz de los pequeños agricultores. El Perú es netamente agrario. Si bien la minería genera divisas, el agro es el que más empleo crea”, asevera.
Carlos Peña afirma que si el Estado viera con buenos ojos a la agricultura, el desarrollo nacional sería equilibrado.
“He tenido la suerte de estar en Chile, donde una hectárea de terreno produce 300 mil kilos de tomate gracias a la aplicación de la tecnología, la genética y mejores condiciones de producción. En Arequipa una hectárea produce más de cien mil kilos de cebolla. Sin embargo, aquí en Lambayeque nos alegramos con 30 kilos por hectárea. ¿Qué significa eso? Que no existe una política de cultivos liderada por el Estado, pero además que hay usencia de los centros experimentales, de la innovación y la tecnología”, manifiesta.
Anota que el Estado debería promover, además, el uso del riego tecnificado. “Cuando se riega con cause se tiene como resultado que un agricultor cosecha entre tres mil y cuatro mil kilos de maíz, con riego tecnificado tranquilamente se puede llegar a 14 mil kilos. ¿Por qué el Estado no promueve la tecnificación en el campo?”, señala.
AGRICULTORES INDEPENDIENTES
Cuando Peña Reluz fue presidente de la Junta Nacional de Usuarios de los Distritos del Riego del Perú convocó al entonces candidato a la presidencia de la república Ollanta Humala Tasso, en la segunda vuelva del 2011, para que suscriba un compromiso con el agro sustentado en 20 puntos considerados prioritarios por las bases agrarias del país.
El acta no se cumplió, por lo que nació la iniciativa de presentar un proyecto legislativo a fin de cautelar uno de los aspectos no atendidos del sector: la pensión del trabajador agrario.
“Como abogado laboralista y previsional analicé la situación y entendí que el 95 % de mis hermanos del campo son independientes. Es decir, no han realizado aportaciones para percibir una pensión de jubilación que cubra, en parte, sus necesidades básicas. ¿Qué pasa con un agricultor cuando supera los 60 años si las labores del campo son arduas y duras, si las inclemencias de la naturaleza no tienen compasión? Ya no hay energías para seguir trabajando. Un agricultor joven puede cargar dos bolsas de urea, dos sacos de maíz, emplear la palana para abrir surcos o limpiar canales. Eso, después de los 60 años resulta imposible”, refiere Peña Reluz.
PROYECTO PARA LAS PENSIONES
Frente a los incumplimientos del gobierno de Ollanta Humala y la desatención a la agenda que suscribió con los representantes agrarios, en asamblea general los representantes de los distritos de riego del Perú aprobaron la presentación de una iniciativa ciudadana para que se implemente desde el Estado una pensión de jubilación para el pequeño agricultor.
De acuerdo a ley, solo se requería de cinco mil firmas de adherentes, pero el proyecto presentado fue acompañado de cien mil.
“El proyecto fue presentado a la Oficina Nacional de Procesos Electorales – ONPE, donde se determinó si era viable o no. Nosotros propusimos que el fondo para el establecimiento de las pensiones se conforme de las regalías mineras; de los montos que revierten año a año los gobiernos regionales y locales, y lo que los propios agricultores podían pagar en la tarifa de agua. Se propuso el establecimiento de una pensión mínima de 500 soles”, manifiesta.
En paralelo se buscó apoyo para que el proyecto ingrese más rápido a su revisión en el Congreso. Así se logró que el 21 de noviembre del 2014 Peña Reluz ingrese el proyecto al legislativo a través del parlamentario Tomás Zamudio Briceño, con la denominación de “Ley de Pensiones del Agricultor Independiente”.
“Más de 50 congresistas respaldaron el proyecto, pero lamentablemente no fue llevado al pleno pese a que pasó por la Comisión de Trabajo y Seguridad Social. Que no se diga que ahora que busco ser congresista recién estoy pensando en los agricultores. No. Hace muchos años vengo gestionando esta iniciativa, que beneficia no solo al agricultor de Lambayeque, sino de todo el Perú. Mi compromiso es trabajar para que los agricultores independientes, esos que han sido olvidados por el Estado siempre, alcancen una pensión de jubilación a los 65 años, que les permita, al menos, paliar las necesidades más elementales”, refiere.
PROBLEMÁTICA AZUCARERA
Peña Reluz comenta que existen otros temas que le preocupan, como la crisis del sector azucarero, sobre todo por las afectaciones que existen por los incumplimientos a los jubilados, viudas y herederos de las excooperativas.
“Es necesario que todos nos juntemos y exijamos por igual el respeto a los derechos de los trabajadores azucareros. Nadie debe dejar de percibir lo que realmente le corresponde, las empresas azucareras son de los trabajadores, especialmente de quienes estamos jubilados. A nosotros nos hicieron comprar lo que era nuestro, como si a una persona, propietaria de su casa, la hicieran pagar nuevamente con sus ahorros. Eso es algo que nos debemos olvidar, pero lo urgente es que las empresas cumplan con el pago de las CTS a los jubilados, viudas y herederos”, sostiene.
El postulante al Congreso de la República señala que “lamentablemente en el sector azucarero se ha desvirtuado la naturaleza societaria de las empresas, pues algunos creen que por tener más acciones tienen derecho de olvidar y postergar a los demás accionistas”.
“El hecho que alguien tenga más acciones que el resto no le da derecho a hacer lo que quiera con la empresa. Existe el derecho de fiscalizar cuáles son los ingresos de las azucareras y que se sincere su situación económica”, menciona.
REPRESENTACIÓN CONGRESAL
El aspirante a la representación congresal por Lambayeque agrega que otro aspecto que el electorado debe tener en cuenta de cara a las votaciones del 26 de enero es la idoneidad de los candidatos.
“Hablar de la problemática del agro no solo debe limitarse al período electoral, como tampoco debatir mejores propuestas para luchar contra la corrupción. Soy consciente, como creo que lo son también los demás candidatos, que el próximo Congreso tendrá un tiempo muy corto para legislar, por eso debemos ser puntuales en la agenda, a fin de no generar expectativas vanas en el pueblo.
Cuando se habla de los problemas del país pocos se detienen a decir que falta calidad en las autoridades que se elige. Se hace necesario que cuando se elija a una autoridad se tenga presente el principio filosófico de Confucio, que dijo: ‘Hay que buscar el hombre para el cargo y no el cargo para el hombre’. Por eso, como representante de los hombres del campo, es que considero que estoy preparado para legislar por los problemas del agro nacional”, enfatiza.
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