“Olmos es ancho y ajeno. Ancho porque son mil kilómetros cuadrados de tierras que tiene el distrito, desde la cordillera hasta el litoral, ricas para sembrar todo tipo de productos alimenticios, pero a la vez es ajeno, porque no es de los lambayecanos. A partir del 2010 la tierra y el proyecto es de Odebrecht y de aquellos que con millones de dólares en el bolsillo pudieron comprar lotes de mil hectáreas como mínimo”, sostiene el rector de la Universidad Particular de Chiclayo, Alberto Ortiz Prieto.

La autoridad universitaria busca emular al escritor Ciro Alegría, autor de “El Mundo es Ancho y Ajeno”, rememorando que en la obra “el hacendado, en su abuso de poder, les dice a los comuneros: ‘Váyanse a otra parte, el mundo es ancho’, y los despoja de sus tierras a los comuneros, pero al mismo tiempo siempre será ajeno o extraño para los comuneros, como lo es ahora para los comuneros de Olmos y Mórrope el proyecto de irrigación”.

LA LOTERÍA

Ortiz Prieto exhorta a las autoridades nacionales y regionales a reivindicarse con los lambayecanos, debido a que – según afirma - el Proyecto Hidroenergético Olmos solo ha beneficiado a la constructora Odebrecht y “en nada a los campesinos de la zona de influencia y mucho menos a los habitantes de Lambayeque”.

“Estamos celebrando 13 años de la multitudinaria marcha que promovimos con la Universidad de Chiclayo para exigir la ejecución de este proyecto, que en ese momento era el anhelo de todos los lambayecanos. En estos momentos que se están descubriendo tantos actos de corrupción en la empresa brasilera Odebrecht, es el momento en que nuestras autoridades se pongan la camiseta de la región y del país para agotar todas las alternativas legales con el objetivo que las tierras que fueron subastadas, reviertan y sean devueltas a los comuneros, a quienes les fueron arrebatadas”, dice.

Fue el gobierno de Alberto Fujimori Fujimori el que expropió 111 mil hectáreas de la Comunidad Campesina Santo Domingo de Olmos para reservarlas como zona intangible para el desarrollo del proyecto. En el 2011, 38 mil de esas hectáreas fueron subastadas a empresas peruanas y extranjeras en un proceso que permitió el financiamiento del componente de irrigación.

Según Alberto Ortiz “desde la ejecución, así como la puesta en operatividad del Proyecto Olmos, las condiciones de desarrollo de los olmanos y de los lambayecanos no han mejorado en nada, cosa muy contraria a los grandes empresarios que ya vienen explotando y comercializando los productos agrícolas que se producen en la zona”.

LA ALERTA

Dice Ortiz Prieto que desde el 2010 se advirtió que la ejecución del Proyecto Olmos “iba a constituir un fraude para los lambayecanos, y el fraude se inició desde que Odebrecht inició la perforación del Túnel Trasandino para trasvasar las aguas del río Huancabamba”.

El túnel –detalla- “empezó con un costo de 185 millones de dólares, el cual en ese momento era un precio fijo, pero grande ha sido la sorpresa no solo para los lambayecanos sino para el Perú entero, saber que con las famosas adendas de contrato, bajo la modalidad de reconocimiento de daños y retrasos, la obra terminó costando 600 millones de dólares”

“En un primer momento se dijo que el Estado solamente iba a invertir 77 millones dólares y el resto iba a ser puesto por la iniciativa privada, en este caso Odebrecht, pero al final ya todos sabemos lo que ha costado Olmos en su primera etapa y encima hemos tenido que pagar las adendas y darle a Odebrecht más de 400 millones de dólares, además de la concesión”, sostuvo, calificando al proyecto como una “gran estafa”.

“Recuerdo con claridad que la exministra Mercedes Aráoz hizo un estudio sobre costos para la irrigación de las tierras, pero al obtener los resultados reales, se opuso a ello”, señala en relación al componente de irrigación ejecutado a través de una iniciativa privada.

La propuesta de Odebrecht, a través de su subsidiaria H2Olmos, para la ejecución de la irrigación de Olmos a través de una iniciativa privada pasó el tamiz de la Contraloría General de la República, Proinversión, el Congreso de la República y el Ministerio Pública. Después de los informes favorables el Gobierno Regional de Lambayeque suscribió el contrato de concesión en el 2010.

JAVIER VELÁSQUEZ

Dice recordar que hubo otros personajes de la política, como es el caso de Javier Velásquez Quesquén, que en ese momento era el presidente del Consejo de Ministros del gobierno aprista, que alentaba a la iniciativa privada.

“No sé qué pasó después y qué motivos hubieron para que se hagan algunos ajustes al proyecto y sea ejecutado a través de la empresa privada. El objetivo era que el proyecto se haga con Odebrecht, a pesar que Mercedes Aráoz se opuso”, sostuvo la autoridad universitaria, quien agrega que finalmente “la estafa se concretó con la venta de tierras con un número mínimo de mil hectáreas por empresa”.

Explica que Odebrecht obtuvo la venta de tierras las que tuvieron un costo a subastar de 4 mil 200 dólares por hectárea, lo que en un primer momento hizo pensar que cualquiera podría acceder, pero al final quedó comprobado que la cantidad mínima a comprar era de mil hectáreas; es decir – señala- cada lote de tierra costaba una millonada de dólares, lo que resultaba imposible para un campesino de la zona y del mismo Lambayeque.

MARCHA

Su mente evoca el año 2010 y recuerda que en esa fecha los lambayecanos se volcaron a las calles para exigir la ejecución del Proyecto Olmos, sin saber las condiciones en las que se haría.

“Hicimos una marcha con la Universidad de Chiclayo. Fue la más grande, pero la hicimos con la intención que el pueblo de Lambayeque, especialmente la zona de Olmos, sea la favorecida. Sin embargo, ahora exijo que la corrupción no quede impune como, por ejemplo el arrebato de las tierras a las comunidades campesinas, las que forman parte de la identidad lambayecana”, sostiene.

Ortiz Prieto afirma que la presunta corrupción en la ejecución del Proyecto Olmos se venía dando desde antes de su ejecución y cita como ejemplo cuando el Congreso de la República dio leyes con nombre propio.

“Desde el 2008 ya había una advertencia de lo que era Odebrecht en el Perú, pero nadie hacía caso. Todo estaba concertado, y ello se tiene que decir con el objetivo que los nombres de los corruptos no queden en el anonimato para que no solamente la justicia los juzgue, sino también para que la población tenga conocimiento”, recalcó.

CABECERA DE PLAYA

En su opinión, dentro de poco el Proyecto Olmos será una “cabecera de playa” agrícola pero no para el Perú, sino para Brasil, país que se dedicará a la industrialización de los productos que se cosechen en la zona, y que sean de la demanda de mercados como el chino e indio.

“Es más que seguro que dentro de poco Olmos se convertirá en la cabecera de playa agrícola de Brasil. Olmos será tierra con agua para dedicarla a la producción de monocultivos como maracuyá, caña de azúcar, espárrago, entre otros productos que sean de utilidad para alimentar a poblaciones de otras partes del planeta, más no habrá ningún producto que sirva de alimento para los lambayecanos”, indica.

Refiere que sería muy interesante que los monocultivos que se desarrollan en Olmos y otras partes de Lambayeque se industrialicen en la región, pero como aquí no hay empresas dedicadas a la agroindustria, los productos son llevados a otras ciudades.

“Lambayeque, desde el punto de vista agrícola, está siendo convertido en un lugar para obreros de brazo o braceros como se les conoce. Es decir, a los lambayecanos, las empresas agroindustriales los contratan por temporadas, pero como obreros. Si esto sigue así y no hay industria, seguiremos siendo simples braceros en Olmos y en el resto de tierras donde existe el cultivo de productos para agroexportar”, sentencia.

 respuesta de luis el 2024-07-09.

 respuesta de Isabel Undurraga Sutton el 2023-12-05.

 respuesta de Piedad Pareja el 2023-09-08.

 respuesta de Carmen Vassallo el 2023-04-16.

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