El sujeto Lucio Pablo Chuman Castillo, denunciado por acoso sexual contra escolares de la Institución Educativa Pedro Abel Labarthe Durand, de Chiclayo, y cuyo caso fue declarado prescrito en la UGEL Chiclayo sin que se aplique la sanción disciplinaria correspondiente, pese a las exigencias de la Defensoría del Pueblo, ha formulado una denuncia contra mi persona por presunta “organización criminal”, en la también incluye a otros comunicadores sociales, por las investigaciones periodísticas realizadas a la gestión del gobernador regional, Jorge Pérez Flores.

¡Nada más descabellado! No resiste análisis jurídico el legajo presentado como denuncia ante el Ministerio Público el último 8 de noviembre, el mismo día en el que, según sus propias redes sociales, visitó la sede del Gobierno Regional de Lambayeque, se fotografío y publicó en su cuenta de Facebook, como avisando que desde ahí le habrían entregado “la denuncia”.

¿Es Chuman el tonto útil de algún funcionario del GORE que está incomodo por los informes periodísticos de Expresión?, ¿Chuman está pagando algún favor?

Chuman se desempeña aún como auxiliar de educación. Según su denuncia, mi persona, como directora de Expresión, recibe financiamiento de terceros, entre ellos del ex gobernador regional Humberto Acuña Peralta; el investigado presidente de la Federación Peruana de Fútbol, Agustín Lozano Saavedra, y la actual vicegobernadora Flor Saavedra López, "para desacreditar a la gestión de Pérez Flores".

Afirma que Expresión recibe publicidad de la Universidad César Vallejo y que esta aparece en las ediciones de nuestro semanario. Sin embargo, desde hace 10 años dicha casa de estudios superiores dejó de ser anunciante de este medio de comunicación.

También señala que Expresión publica artículos de la mencionada universidad y promociona propaganda política del partido Alianza Para el Progreso, pese a no ser época electoral.

Debo afirmar que todas las investigaciones sobre el Gobierno Regional de Lambayeque y la gestión del gobernador Jorge Pérez Flores, difundidas por Expresión, se encuentran debidamente documentadas y tienen como base fuentes oficiales y a las mismas dependencias de la entidad regional. Es más, por ninguna de ellas este medio de comunicación ha recibido alguna solicitud de rectificación, carta notarial o querella.

Desde este medio que es Expresión rechazo este tipo de actos que atentan contra la libertad de prensa, la libertad de expresión y pretenden intimidar, valiéndose de terceros, a los medios de comunicación que resultan incómodos para el poder político regional.

Estimados lectores, Lucio Chuman es el mismo personaje que solicitó la vacancia del consejero regional Ricardo Lara Doig, quien presentó el pedido de suspensión contra el gobernador Jorge Pérez, el mismo que fue aprobado por el Consejo Regional.

Dice el refrán popular muy conocido que no hay mal que por bien no venga, el Ministerio Público debe investigar de oficio a Chuman y a quienes en la UGEL Chiclayo lo habrían ayudado a que prescriba la denuncia en su contra por acoso sexual, caso que incluso la Defensoría del Pueblo siguió de cerca. Una denuncia de esta naturaleza no puede quedar en impunidad.

Debo señalar que no soy funcionaria pública y que esta denuncia no tiene asidero legal. Una acusación como la que ha formulado este sujeto guarda sus procedimientos, fundamentos y no se volantea como lo ha hecho después de presentarla ante el Ministerio Público.

Resulta pues una falsa denuncia, porque las publicaciones sustentadas en Expresión no son delitos, no constituyen infracciones, quebrantamientos a la ley. En el sagrado deber que como periodista tengo y conforme me avala la Constitución Política de nuestro país, estoy haciendo uso del derecho y ejercicio de un periodismo libre, responsable que busca la verdad y justicia sobre lo que hacen sus funcionarios públicos con los recursos del Estado.

Agradezco los mensajes, las muestras de solidaridad, los análisis legales y pronunciamientos institucionales como el del Colegio de Periodistas del Perú, de la Asociación Nacional de Periodistas del Perú y de la Cámara de Comercio y Producción de Lambayeque, porque fijan una posición principista y  porque son convencidos que los informes periodísticos de Expresión no faltan a la ética ni a la verdad, y que esta denuncia disfraza un propósito temerario contra la prensa lambayecana, con la que buscan intimidar, amordazar y desprestigiar a quienes ejercemos el periodismo hace muchos años, como en mi caso -39 años de colegiada y 31 dirigiendo el Semanario Expresión.

Con la bendición de Dios seguiré más firme que nunca en mi labor periodística.