La falta de educación vial, tanto en Lambayeque como a nivel nacional, es la causa principal de los recurrentes accidentes en las zonas urbanas. Por ello, el Consejo Regional de Seguridad Vial de Lambayeque – CRSV, realizó la campaña “Peatón responsable - Caminemos seguros” con la finalidad de instruir a los transeúntes y conductores locales sobre las normas de tránsito que con los años se han ido olvidando.
La campaña “Peatón responsable - Caminemos seguros” se encuentra dentro del plan de trabajo del CRSV, organismo especializado por realizar actividades que impulsan la concientización de la seguridad vial en Lambayeque. El secretario del Comité Regional de Seguridad Ciudadana, Carlos Balarezo Mesones, menciona que en la realización de la actividad se contó con el apoyo del alumnado del Colegio Privado San Martín College, que participó en la aplicación de papeletas correctivas junto con la Policía de Tránsito.
“Es una campaña que busca realizarse con diferentes centros educativos. Lo que queremos lograr es que el peatón y el conductor tomen conciencia de la importancia de respetar las señales de tránsito. Un aspecto importante es que la inseguridad ciudadana se encuentra relacionada con este aspecto debido a que Chiclayo cuenta con una altísima informalidad de transporte y esto repercute a la presencia de altos índices de accidentes de atropello al peatón”, explica.
Señala que debe ser una iniciativa impulsada por todos los municipios de Lambayeque, teniendo un mayor apoyo por parte de los consejos descentralizados en cada provincia, los cuales deben tomar acción respeto a la concientización al peatón y conductor sobre las normas de tránsito al igual que el conocimiento sobre el sistema de reducción de puntos por infracciones.
ACCESIBILIDAD VIAL
Balarezo Mesones señala que uno de los planes a realizar este año es el fortalecimiento de los consejos distritales de seguridad vial, para que así los índices de mortalidad por imprudencia peatonal disminuyan paulatinamente.
“El año pasado se registró una incidencia de más de 550 personas fallecidas y el 85 % de estas eran de las zonas urbanas de Chiclayo y José Leonardo Ortiz, en los lugares que son atravesados por la carretera Panamericana o por las vías principales. Las víctimas son personas adultas o niños, y la falta de señalización adecuada como semaforización y las cebras peatonales, al igual que la falta de educación vial por parte del peatón, son las causas de estos siniestros”, expone.
Advierte que la implementación del acceso vial es un tema propio de los municipios y que gracias al informe de la Defensoría del Pueblo, que enlista una serie de deficiencias en el tema, se espera que las autoridades locales puedan actuar con prontitud para reducir la problemática.
“Sé que hay un esfuerzo por parte del alcalde de Chiclayo por revertir esta gravísima situación que viene desde hace muchos años atrás. No es solo por la falta de interés de la anterior gestión, sino por la corrupción. Hay mucha informalidad en el transporte urbano e interprovincial y esperamos que en esta gestión se pueda revertir. En el informe de la Defensoría del Pueblo se encontraban las problemáticas sobre la falta de semaforización, que al parecer la ubicación y la sincronización no son las más adecuadas; el tema de la informalidad del transporte, la falta de pintado de cebras, y otros diversos temas que no son atendidos aún”, indica.
Carlos Balarezo propone como solución aplicar el Plan Regulador de Rutas, que aún se encuentra en vigencia para ponerse en marcha. Sostiene que los problemas de transporte en Chiclayo son los principales causantes que afectan directamente a la seguridad ciudadana, y que, al no aplicarse el plan, “la situación se agravaría aún más”.
“El plan contempla fundamentalmente hacer un censo y saber si el volumen de vehículos que transitan en la ciudad es suficiente y si habría que evitar dar más autorizaciones. Estamos hablando que en Chiclayo y en sus dos distritos principales hay aproximadamente 35 mil taxistas, de los cuales solo 12 mil son formalizados y el resto no, entonces es un problema grave. La solución también está en la construcción de un terminal que hasta la fecha está en espera”, expone.
EDUCACIÓN VIAL
El secretario técnico del Comité Regional de Seguridad Ciudadana menciona que el trabajo que se está enfatizando a través del Consejo de Seguridad Vial es a nivel de educación, para lograr sostenibilidad. Asimismo, sostiene que después de la reunión con 800 directores de los colegios de Lambayeque, se espera contar con el apoyo de 300 colegios para realizar campañas de concientización.
“Ahí están los nuevos ciudadanos. Es un poco más difícil cambiar el hábito de la persona adulta, por eso, lo que estamos haciendo es que los propios alumnos enseñen a los conductores y peatones las normas de tránsito. Estamos apoyándonos con el Touring Automóvil del Perú con la presentación de un circuito que contiene semáforos y vehículos que permiten recrear de manera interactiva en el aprendizaje, y hemos capacitado alrededor de 500 alumnos en Monsefú con este circuito”, explica.
Señala que en el Perú el índice sobre educación vial es bajo y por ello este es uno de los países con mayor siniestralidad del mundo en accidentes de tránsito, agregando que “hay poco respeto al valor principal del ciudadano que es el respeto a la vida y el de los demás”
SISTEMA DE PUNTOS
Desde la modificatoria del Decreto Supremo 016-2009 del Ministerio de Transportes y Comunicaciones – MTC, del Código de Tránsito, existe una nueva calificación especial en el cuadro de infracciones de los conductores, en las que, a través de jornadas informativas o capacitaciones, el conductor tiene la oportunidad de reducir el puntaje acumulado por el número de infracciones que presente.
“Todo conductor no debe llegar al tope de los cien puntos, porque sí no sería sancionado la primera vez por seis meses, la segunda por un año y la tercera de manera definitiva. A través del consejo, desde el año 2014, se viene implementando este sistema por el que a través de cursos de capacitación y jornadas extraordinarias se reducen los puntos a los conductores. Una jornada equivale a la reducción de 20 puntos en el sistema y un curso es igual a la reducción de 30 puntos en el período de dos años. Es gratuito el récord, la capacitación y el certificado que se les brinda. Lo que deseamos realizar es una capacitación a todos los conductores de la región para que puedan emplear este nuevo sistema y así a la vez convertirlos en conductores responsables”, concluye.
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