En los últimos día escucho de manera reiterativa que Lambayeque, nuestro departamento necesita de su reconstrucción y me pregunto ¿tan mal estamos?. La lluvia del pasado 4 de febrero nos ha dejado una ciudad bombardeada no solo por una lluvia de 7 horas continuas, sino por el colapso  de su alcantarillado que hunde a la ciudad de Chiclayo en particular y que ha malogrado cientos de viviendas en las  tres provincias y sus 38 distritos.

Familias que lo han perdido todo, de la noche a la mañana, hoy se han vuelto  ciudadanos precarios, la mayoría  están recibiendo ayuda humanitaria para su subsistencia, pero no es suficiente.

Sin embargo la reconstrucción de Lambayeque no va precisamente por lo físico, pista, veredas, alcantarillado, construcción del Drenaje Pluvial,  se trata que nos hemos convertido en el departamento que hace seis años sigue cayendo en los índices de Competitividad Regional, según el estudio queelabora anualmente  el Instituto Peruano de Economía – IPE y donde refleja a Lambayeque a  la baja.

Es preocupante que desde el 2010 el departamento de Lambayeque, salió del grupo de los cinco mejores a nivel nacional, para descender al puesto nueve. ¿Por qué, cuáles son esos factores?. ¿Qué estamos haciendo a nivel de Sociedad Civil organizada?

Es penoso reconocer que la realidad por indicadores es aún mucho más negativa. El Índice de Competitividad Regional evalúa la posición de las 24 regiones del país estudiando seis pilares: Entorno Económico, Infraestructura, Salud, Educación, Laboral e Instituciones, cada uno compuesto por varios indicadores, 46 en total, que permiten medir el rumbo que cada región del país toma, así como identificar sus principales fortalezas y debilidades.

El propósito en sí es que con la revisión de los resultados las regiones, sus autoridades y sociedad civil, centren esfuerzos en implementar políticas públicas adecuadas que generen un mayor impacto sobre su desarrollo.

A fin de lograr mayor precisión, el estudio recoge la información oficial más actualizada, tabulada empleando la metodología usada para calcular el Índice Global de Competitividad del Foro Económico Mundial.

Oh sorpresa, Lambayeque no lidera ninguno de los pilares y tampoco ninguno de los 46 indicadores que contiene el índice. Desde ya esa precisión permite proyectar la situación en la que se encuentra el departamento en comparación con los otros 23 del país.

Si el 2014, fue un año desalentador para Lambayeque, según los resultados que arrojó el Índice de Competitividad Regional. De haber estado en el puesto siete el año anterior, descendimos al noveno. Fuimos ampliamente superados por La Libertad, Tumbes, Madre de Dios, Tacna, Ica, Arequipa, Moquegua y Lima, en orden ascendente.

En el Entorno Económico, Lambayeque se posicionó en el puesto 11, en lo Laboral pasó del puesto 12 al 16; en Educación del siete al nueve, manteniendo la séptima ubicación en Salud. También reservó el puesto nueve, logrado en el 2013, en Infraestructura.

El retroceso en Instituciones fue notorio en el 2014. El año anterior tuvo el séptimo lugar, cayendo al puesto 13 de manera vertiginosa.

La percepción de la Corrupción en Lambayeque, en el 2014, la ubicó en el puesto ocho de 24 regiones, sitio que también ocupó respecto a la Rendición de Cuentas Públicas. Asimismo, cayó al puesto 19, en cuanto a Ejecución de la Inversión Pública; al 13 respecto a Percepción de la Gestión Pública; al octavo en Conflictos Sociales y al 18 en Criminalidad. La Percepción de Seguridad mejoró, al ascender el departamento del puesto 24 al 19.

Si hablamos de resultados en el  2015 de acuerdo al Índice de Competitividad Regional, Lambayeque se ubicó en el noveno lugar, puesto en que también estuvo en el 2014. Delante de Lambayeque se posicionaron: Lima, con el primer lugar, Moquegua, Arequipa, Ica, Tacna, Madre de Dios, Tumbes y Cusco, en modo descendente.

Respecto a Infraestructura, el IPE ubicó a Lambayeque en el sexto puesto, en cuanto a Entorno Económico la ubicación fue aún más baja. La región ocupó el décimo lugar en el país.

En Educación se le otorgó a Lambayeque el séptimo lugar y el 18 en relación al aspecto Laboral, siendo superada por regiones como Tumbes y Loreto. Solo en Salud se logró un avance al quinto lugar.

El resultado más grave para Lambayeque fue, indudablemente, el referido a la medición de la Institucionalidad. En el 2015 la región se ubicó en la última de las 24 ubicaciones, evidenciando un severo problema que repercutió directamente en el crecimiento socio económico.

Y si nos referimos a las deducciones del 2016, lo que el Instituto Peruano de Economía evidenció el año pasado de Lambayeque no dejó de ser menos alentador. Lambayeque se posicionó en el octavo puesto a nivel nacional en competitividad, escalando solo un peldaño respecto a los resultados generales evaluados el 2015 y el 2014.

Respecto al Entorno Económico, el departamento ocupó el puesto ocho. En este pilar se evaluaron los siguientes indicadores: en Producto Bruto Interno Real tuvo el puesto 10; en Producto Bruto Interno Real Per Cápita, el 15; en Stock de Capital por Trabajador, el 15, por debajo del promedio nacional; en Presupuesto Público Per Cápita el puesto 23; en Gasto Real por Hogar Mensual el séptimo lugar; en Incremento del Gasto Real por Hogar, el tercero; en Disponibilidad de Servicios Financieros, el sexto, y en Acceso al Crédito, el séptimo.

En Infraestructura, Lambayeque también se posicionó en el octavo lugar. En este pilar se analizó, por ejemplo, la Cobertura de Electricidad, en la que ocupó el sexto puesto a nivel nacional; el Precio de la Electricidad (15), la Cobertura de Agua (9), la Continuidad de la Provisión de Agua (19), la Cobertura de Desagüe (6), Hogares con Internet (5), Hogares con al Menos un Celular (6) y Densidad del Transporte Aéreo (11).

En Salud se retrocedió al puesto seis. Lambayeque fue la cuarta región con el mejor índice de Esperanza de Vida al Nacer; la cuarta con mayor índice de Mortalidad en la Niñez; la octava en Desnutrición Crónica; el puesto 17 en Morbilidad; el sexto en Cobertura del Personal Médico; el cuarto en Cobertura Hospitalaria; el once en Partos Institucionales, y el 15 en Acceso a Seguro de Salud.

Los resultados en Educación retrocedieron a la ubicación 11 entre las 24 regiones evaluadas, y en lo Laboral, el puesto dado a Lambayeque fue el 11.

La noticia, mediamente positiva, fue que Lambayeque salió del último lugar nacional en institucionalidad, para ubicarse en el puesto 21.

En Ejecución de la Inversión Pública se le dio al departamento el puesto 21 de 24 evaluados, igual que en el indicador de Fondos Públicos no Concursados. En Percepción de la Gestión Pública el lugar asignado fue el 23; el 11 en Conflictos Sociales; el 20 en Criminalidad; el ocho en Homicidios; el 13 en Presencia Policial; y el 15 en Resolución de Expedientes Judiciales.

Es por estas y otras razones que la Sociedad Civil organizada tiene que dejar sentada su presencia y prestancia para ayudar a la reconstrucción de Lambayeque, este atraso en diversos rubros de desarrollo y competitividad regional nos debe llamar la atención y para ello debemos asumir un papel fiscalizador, exigir que quienes asuman el liderazgo de los diferentes sectores públicos sean personas competitivas que nos muestren con su dirección resultados favorables para Lambayeque.

Es hora de que juntos vayamos por la reconstrucción de Lambayeque en todos los aspectos.