El Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, conmemorado cada 25 de noviembre, trasciende más allá de una fecha en el calendario. Este día, marcado por la Organización de las Naciones Unidas - ONU, nos invita a reflexionar sobre la persistencia de la violencia de género y la urgencia de erradicarla. La elección de esta fecha remite al brutal asesinato de las hermanas Mirabal en 1960, tres valientes activistas políticas dominicanas que desafiaron la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo.
En la sociedad actual, las mujeres se enfrentan a desafíos complejos. A pesar de los avances, la violencia persiste en diversas formas, desde la física hasta la psicológica. Las brechas de género se manifiestan en el ámbito laboral, donde las mujeres a menudo ganan menos que sus contrapartes masculinas por el mismo trabajo. Se estima que en el Perú el salario de una mujer es 30 % menos que el de un varón, por realizar las mismas actividades. Estos desafíos son reflejo de estructuras sociales arraigadas en estereotipos de género que limitan las oportunidades y la libertad de las mujeres.
Las estadísticas de violencia contra la mujer, niñas y adolescentes en América Latina son alarmantes. Según informes de la CEPAL al 2023, la región presenta cifras preocupantes, con un alto índice de feminicidios y violencia doméstica. En países como México y Brasil, las tasas de homicidios de mujeres son especialmente elevadas. En el Perú, a pesar de los esfuerzos por combatir la violencia de género, las cifras también son inquietantes, con un número significativo de casos de feminicidios y abusos a menores.
Entre enero y octubre de este año, se ha registrado en el Perú 142 casos con características de feminicidio, siendo octubre el mes con mayor incidencia, al registrar 19 casos. El 56.3 % de feminicidas eran parejas de las víctimas. De las víctimas, el 89.4 % eran mujeres adultas y el 7.7 % niñas y adolescentes.
Existen otras cifras que no dejan de ser alarmantes, como la referida a los 211 casos de tentativa de feminicidio reportados también entre enero y octubre; los 10 mil 610 casos de violación sexual o los 53 mil 758 casos de violencia física.
Ante ello, el gran reto radica en transformar las estructuras sociales y culturales que perpetúan la violencia de género. La educación desempeña un papel fundamental en este proceso; es necesario inculcar desde temprana edad valores de respeto, igualdad y empatía. Además, es imperativo fortalecer las leyes y políticas que protegen a las mujeres, garantizando una aplicación efectiva y justa. La creación de espacios seguros para denunciar y recibir apoyo es esencial para romper el ciclo de violencia.
La participación activa de hombres en esta lucha es crucial. La construcción de alianzas sólidas entre géneros promueve una cultura de respeto mutuo y desmantela la toxicidad de la masculinidad tóxica. Los medios de comunicación también deben asumir una responsabilidad ética, contribuyendo a la construcción de una imagen más equitativa y positiva de las mujeres.
Es indispensable abordar las brechas económicas y laborales. La igualdad salarial y la promoción de mujeres en roles de liderazgo son pasos esenciales hacia una sociedad más equitativa. La autonomía económica de las mujeres es un poderoso instrumento para su empoderamiento y independencia.
La atención integral a las víctimas de violencia es esencial. Se requiere una red de apoyo que incluya servicios de salud mental, asesoramiento legal y refugios seguros. Fomentar la denuncia y garantizar la protección de las mujeres que han sufrido violencia es fundamental para erradicar este flagelo.
En conclusión, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer es una llamada a la acción global y ojo, no se celebra, ¡se conmemora! La erradicación de la violencia de género no es solo responsabilidad de las mujeres, sino de toda la sociedad. Sólo mediante un compromiso colectivo y continuo podremos construir un mundo donde todas las mujeres vivan libres de violencia y disfruten de los mismos derechos y oportunidades que los hombres.
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Editora / Directora fundadora
