El Día Internacional de la Mujer es una fecha que se celebra en muchos países del mundo. Mujeres de todos los continentes, a menudo separadas por fronteras nacionales, diferencias étnicas, lingüísticas, culturales, económicas y políticas. Ellas se unen para celebrar su día, y así poder contemplar una tradición de no menos de noventa años de lucha en pro de la igualdad, la justicia, la paz y el desarrollo.
Pero en esta lucha incansable por la igualdad de género y de oportunidades y la lucha por sus derechos, aún existen muchos tabúes y/o prejuicios morales con respecto a la sexualidad responsable y la prevención.
Muchas veces se piensa que si una mujer habla de protección en el acto sexual es porque tiene o lleva una vida bohemia, o en otros casos lo relacionan con personas de la vida fácil, pero lo que hay que entender es que si hablamos de protección o de utilizar un método anticonceptivo no solo es responsabilidad del hombre, sino también de la mujer, debido a que una planificación familiar le compete a ambas personas en la relación.
Anteriormente se pensaba que solo los hombres eran los que tenían el deber de protegerse, sin embargo en las mujeres también radica la responsabilidad de velar por su salud sexual, así como en cualquier otra situación, depende de ellas mismas el prevenir ITS o embarazos no deseados. Como tal, una mujer que lleva un preservativo en su bolsa no significa que sea una “chica fácil”, por el contrario es una mujer responsable y segura de sí misma, que protege su salud sexual.
El tener una vida sexual activa implica distintos riesgos y tanto hombres como mujeres tienen el derecho de conocerlos, no solo para prevenir ITS o embarazos no deseados sino también para comunicarlo a otros jóvenes en riesgo, de esa manera colaboran en la educación sexual de nuestro país.
Si bien es cierto, a pesar de la modernidad que existe, aún tenemos una sociedad dominada por los prejuicios machistas y tabúes. El día internacional de la mujer, es una fecha creada con la finalidad de luchar por una igualdad de género e igualdad de oportunidades, por entender que tanto hombres como mujeres pueden tener los mismos derechos y responsabilidades en cualquier aspecto, incluso en la vida sexual. Una mujer es capaz de decidir cómo quiere llevar su vida sexual y de qué manera protegerse.
Existen distintos canales de información gratuita y accesible, no hay nada de malo en consultarlos, al contrario, es deber de cada una informarse y vivir responsablemente su sexualidad.