Administradora, empresaria, docente, especialista en contrataciones del estado, madre, pero, sobre todo, mujer. Virginia Palacios Gallardo ha escrito el libro ‘Renacer: El Poder de ser mujer en el siglo XXI’, un testimonio de vida que busca empoderar a las mujeres enfrentadas a un mundo de desigualdad, barreras, estereotipos y desafíos constantes.
Virginia Palacios muestra en esta su primera obra cómo la voz de la mujer se alza en medio de tanto ruido social y trae las pautas para fortalecer la autoestima, el liderazgo y el papel de la mujer en la sociedad actual.
El libro
La narrativa del libro es testimonial. A lo largo de sus cien páginas, la autora establece una conversación íntima con sus lectoras, pues busca que ‘Renacer’ sea entendido como un manifiesto de libertad y valentía. Está impregnada de inspiración y destinada a aquellas mujeres que buscan redefinir su historia y para quienes desean comprender, apoyar y celebrar la lucha femenina en el siglo XXI.
Los ocho capítulos de la obra de Virginia Palacios son un llamado a la acción y reflejan una generación de mujeres que se niegan a ser silenciadas y que, en su propio renacer, encuentran como aves fénix el verdadero poder de ser ellas mismas.
Reflexiones
Entre las múltiples reflexiones que esgrime la escritora en su libro está el construir comunidad entre las mujeres y practicar la sororidad, a fin de impulsarse como colectivo. Virginia Palacios llama a sus lectoras a buscar otras mujeres con intereses, valores o metas similares, de modo que se encuentren personas con quienes compartir luchas y logros.
Exhorta también a practicar una escucha activa, es decir, con atención y empatía, esto a fin de construir relaciones significativas. “La sororidad implica un intercambio constante. No temas ofrecer ayuda cuando alguien lo necesite, pero también aprende a pedir apoyo cuando lo requieras”, destaca la escritora.
La carga mental
De otro lado, Virginia Palacios también reflexiona sobre lo que ella llama la “carga mental”, es decir, el esfuerzo invisible que hay detrás de la gestión de las tareas diarias, debido a que este peso recae de manera desproporcionada en las mujeres por cuestiones histórico culturales.
Apunta que, a pesar de los avances en materia de igualdad de género, la distribución de las tareas domésticas y de cuidado sigue siendo desigual, por lo que aconseja a las mujeres a dialogar sobre estas cargas y crear espacios donde las mujeres puedan reconocer su valor y exigir una distribución más justa de las taras.
Palacios Gallardo exhorta a las mujeres a delegar estas tareas, sin que esto sea visto como un signo de debilidad, sino de inteligencia emocional. “Delegar no te hace menos capaz ni menos responsable. Aprende a decir ‘confío en ti para esto’ y libera tiempo para enfocarte en lo que realmente importa”.
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