¿Eres de las personas que se quedan hasta tarde en internet, viendo televisión o películas, haciendo trabajo o en una fiesta? ¿Sabías que esto afecta de manera a tu organismo? Y es que estos malos hábitos sumados a las responsabilidades laborales, preocupaciones personales entre otros motivos afectan nuestra calidad de sueño. Ya se conoce que dormir poco, es decir menos de las 8 horas recomendadas por los especialistas afecta nuestro organismo tanto físicamente y psicólogo .
No dormir lo suficiente provoca subida de peso, el mal humor, estrés, cansancio, dolores de cabeza y cuerpo, y según estudios un mal descanso y la pérdida de deseo sexual tanto en mujeres como en hombres también se encuentran estrechamente vinculados. Por otro lado, la disminución del goce sexual no es el único factor que se afecta durante el sexo, también intervienen en el rendimiento y la periodicidad del encuentro.
Y esto se debe a que el poco descanso afecta el estado ánimo y produce fatiga, lo que influye directamente en el acto sexual. Un mal descanso como también casos de insomnio se asoció a su vez con una disminución de la función sexual. La privación de sueño produce alteraciones metabólicas importantes, y éstas afectan a diversos sistemas hormonales, entre los que se encuentran las hormonas sexuales.
Cabe señalar que esto no solo afecta al género femenino, en el caso de los hombres también disminuye los niveles de testosterona, hormona que se encarga de la producción de espermatozoides así como de mantener el deseo sexual activo.
Es por ello que dormir es imprescindible para nuestro funcionamiento físico y mental. Pero no se trata sólo de dormir, sino de dormir bien, de tener un sueño de calidad. A mayor calidad de sueño, mejor rendimiento en todas nuestras actividades diarias ¡En todas! También en lo que respecta a nuestra esfera sexual: a mayor calidad de sueño, mayor y mejor respuesta sexual.
No es malo trasnochar una o dos veces por semana por trabajo o viendo alguna película, esto se vuelve negativo cuando lo conviertes en un hábito de vida.
Así que, si estás pensando o tienes el hábito de trasnochar muchas veces por semana, tu deseo, el desempeño y la intensidad durante el sexo no serán las mismas como cuando duermas bien y descanses por la noche. ¡Piénsalo!
el ayer. Valdría la pena también difundir biografías ejemplarizadoras: un José de la Mar, derrocado y olvidado en el exilio protestando por la pérdida de su honor; un Domingo Nieto, agonizando tras veinte años de lucha por la constitucionalidad, pidiendo a la Nación protegiese a su familia; un Miguel Grau, diputado que pidió licencia para partir al frente de guerra, pese a ser el único sustento de su numerosa familia; un José María Hernando, ex diputado y oficial mayor del Congreso, escondiendo las actas parlamentarias del invasor chileno, antes de partir a morir a Miraflores; un Santiago Figueredo, modesto magistrado judicial, guardando celosamente el dinero colectado por las familias humildes para comprar nuevos barcos de guerra a principios del siglo XX. Ejemplos que las futuras generaciones deben conocer, deben valorar y comprender. Que a pesar de los “podridos”, los “congelados” y los “incendiados” los de los que hablaba Basadre, hay numerosos ciudadanos que creen en el Perú y que se esfuerzan por su grandeza.
