A mediados del año 2024 el Instituto Peruano de Economía (IPE) publica la 12 edición del de su obra Índice de Competitividad Regional – INCORE 2024 con el objetivo de analizar los avances y retrocesos en el desarrollo del Perú y de las regiones (departamentos que lo conforman). El resultado de este importante estudio es un ranking regional que permite precisar el grado de desarrollo que tiene cada uno de los 25 departamentos y, con ello le da una buena base a la discusión especializada y una consistencia en la toma de decisiones políticas que, debieran, ser su consecuencia obligada. En algunos casos, hemos visto más bien rabietas o intentos de contradecir estos resultados.
Desde un principio hemos celebrado la comprensión de la competitividad como un hecho o proceso multidimensional – no meramente productivo – y ello le da una solidez a los resultados del estudio. Con la data que se cuenta, en algunos casos no tan sólida como quisiéramos, se analizan los 6 pilares o componentes del desarrollo territorial:
Economía, Infraestructura, Salud, Educación, Laboral e Instituciones. Cada uno de estos componentes tienen sus respectivas variables que tienen data suficiente como para definir indicadores cuantificables. Seguramente con el tiempo y, a medida que se produzca una data más confiable, el número de componentes y variables también se incrementará. Por ahora nos parece que los 40 indicadores que se emplean en el estudio proporcionan una buena base para el debate y para la toma de decisiones. Sin embargo, el estudio también nos alerta de que, en algunos indicadores se ha tenido que usar data de años anteriores.
Si tomamos en cuenta el Desarrollo o Competitividad ideal que sería igual a 10, nos encontramos que Moquegua, la región con mejor desempeño, tiene 7.6 de puntuación. Ello significa que como país estamos inmersos en una brecha muy grande, muy significativa y que cuestiona a los gobernantes nacionales y regionales de los últimos tiempos,
EL CASO DE LAMBAYEQUE
En cuanto a Lambayeque nos encontramos que en el resumen general del estudio Lambayeque no es mencionado en ninguno de los seis componentes, lo que confirma que Lambayeque sigue sumergido en la mediocridad del séptimo lugar, a pesar de los discursos inflamados de promesas y de logros que pocos lo toman en serio.
En el índice de competitividad regional – INCORE, Lambayeque se encuentra a mitad de lo que sería el desarrollo regional ideal y el desempeño en los seis componentes es el siguiente:
Lambayeque ocupa el puesto 7 de 25 regiones evaluadas, en cuanto a puntaje ostenta 5, de 10 posibles, es decir está a mitad de la tabla, lo que, nos sigue pareciendo bastante bajo, si consideramos sus potencialidades y su relativo poco accidentado territorio.
El mejor desempeño se produce en los componentes de salud, en Infraestructura y en educación. El peor desempeño se lo obtiene en instituciones, laboral y entorno económico.
Una mirada al interior de cada uno de los componentes nos arroja los siguientes resultados:
Entorno económico, las variables con mejor desempeño lo obtiene PBI real per cápita y stock de capital por trabajador. El peor rendimiento lo obtiene presupuesto público per cápita mensual y acceso al crédito.
En infraestructura, las variables con mejor desempeño son: precio medio de electricidad (puesto 1) y acceso a la electricidad, agua y desagüe, y las variables con el peor desempeño son: red local vial pavimentada o afirmada y continuidad en la provisión de agua.
En Salud, las variables con mejor desempeño: esperanza de vida al nacer y prevalencia de anemia y las variables con el peor desempeño son: partos institucionales y vacunación completa a niños menores de 36 meses.
En Educación, las variables con mejor desempeño son: colegios con acceso a internet y colegios con los tres servicios básicos (agua, desagüe y electricidad). Las variables con peor desempeño: rendimiento escolar en primaria y asistencia escolar.
En Laboral. Las variables con el mejor desempeño son: densidad del empleo formal asalariado privado e índice de formalidad laboral. Las variables con peor desempeño son: brecha de género en ingresos laborales y brecha de género en participación laboral.
En Instituciones. Las variables con el mejor rendimiento son: conflictividad social (puesto 4) y victimización por hechos delictivos (puesto 5). Las variables con peor desempeño son: ejecución de la inversión pública (puesto 24) y percepción de la inversión pública regional (puesto 24).
Una revisión desapasionada de estas variables y sus respectivos indicadores, nos podría hacer bajar de nuestra nube y preguntarnos si en el mal o buen desempeño de una variable tiene que ver la buena, regular o mala gestión como municipalidad, como gobierno regional o como ministerio. Por ejemplo, en las variables “ejecución de la inversión pública” y “percepción de la inversión pública regional”, en los que Lambayeque ocupa los penúltimos lugares, ¿tiene que ver con la gestión del gobierno regional? Este tipo de debate es el que se necesita generarlo, profundizarlo, pero no se lo asume. Si esta actitud se mantiene seguiremos en situación de “jalados en competitividad regional”.
-------
*Antropólogo. Celular 951679597.
Deja tu Comentario