Terapeuta energética, Milagros Herrera, sostiene que en el mundo las personas generan más cortisol que dopamina, el cual envenena progresivamente el cuerpo y lo hace pasible de contraer cualquier enfermedad. Ella recomienda que cada día de tu vida sea el mejor día de tu existencia, por ello hay que vivir en el amor porque solo estamos de paso en la tierra.

La reconocida terapeuta energética, Milagros Herrera Vargas, sostiene que en el planeta existen dos energías muy poderosas: una se llama miedo; y la otra, amor. “Si entras en el miedo te vas a paralizar, pero si caminas en el amor a ti mismo vas a actuar, entonces el punto neurálgico de toda enfermedad es el miedo, que lo único que hace es que nuestras células se contraigan”, indica la profesional de origen chiclayano, pero que desde hace más de 26 años radica en España.

Herrera Vargas llegó a la Capital de la Amistad para atender asuntos familiares, pero se dio un tiempo para dialogar con Expresión sobre el novedoso trabajo que desarrolla en el centro de salud que ella dirige en Barcelona, el cual cuenta con siete terapeutas, entre ellos tres médicos alopáticos: un neurólogo, cardiólogo y laringólogo, quienes han estudiado dos carreras: la medicina alopática y la medicina china, pero trabajan con la medicina natural.

La medicina alopática, o también llamada biomedicina, es un sistema por el cual los médicos y otros profesionales de la salud, tratan los síntomas y las enfermedades por medio de medicamentos, radiación o cirugía. Se basa fundamentalmente en tratar enfermedades a través de drogas que actúen por el mecanismo de “los contrarios”. Esto es: si hay gripe, se suministra un antigripal; si hay fiebre, se receta un antifebril; si hay inflamación, se medica con un antiinflamatorio.  

La terapeuta energética señala que el planeta está en un cambio muy grande, y uno de ellos es la unión de dos medicinas: la medicina natural y la medicina alopática, a las cuales hoy en día se conoce a nivel mundial como medicina integrativa, entonces su misión es fomentar de que uno es el propio sanador de su cuerpo.

Hay que encontrar el equilibrio

Milagros Herrera viaja por diferentes países donde le solicitan, para detectar el por qué una persona llega a tener una enfermedad. “Uno dice ya enfermé, pero hay una razón para que estés enfermo, si bien los médicos van a tocar el cuerpo físico para sanarlo, pero hay que saber qué pasó con las emociones, con tu energía, con tu mente, contigo mismo. Entonces nosotros tratamos de llevarte al reequilibrio de tus cuatro cuerpos: el físico, mental, emocional y el energético espiritual”, precisa.

Manifiesta que nuestras células se enferman porque generan más cortisol (hormona que se produce en las glándulas suprarrenales y ayuda a regular la presión arterial, reduce la inflamación y mantiene el corazón y los vasos sanguíneos funcionando normalmente) que dopamina (neurotransmisor involucrado en la toma de decisiones y en muchas otras funciones cerebrales como la memoria, las sensaciones placenteras, el sueño, el estado de ánimo, entre otras), de allí que cuando hay miedo, tensión, frustración, rabia, impotencia, se genera más cortisol, el cual es muy dañino porque envenena poco a poco el organismo.

¿Entonces en las emociones radica el origen de todas las enfermedades que hay hoy en día?

Así es. Es más, cada órgano es una emoción, si tú estás mal del riñón, tu emoción es la rabia, la impotencia; la diabetes viene del dolor de la familia, y la sangre es familia; la hipertensión es la familia no canalizada desde la armonía; es decir que parte de ella (familia) no está en equilibrio. Es tan hermoso el camino energético espiritual que siempre invito primero a entrar dentro de uno mismo, conocerse mucho, y a partir de allí ver la grandeza que hay dentro de ti.

En estos últimos tiempos el cáncer ha aumentado, y nos preguntamos por qué, he leído que mucha gente se ha curado cuando ha empezado a vivir en el amor, en el perdón

Nosotros ponemos en práctica la famosa frase del Ho’oponopono, una técnica milenaria de origen hawaiano, que se enfoca en el proceso de reconocimiento, arrepentimiento y perdón, permitiendo realizar una limpieza de sentimientos y pensamientos negativos en la mente de las personas, para así bloquearlos y corregirlos. Hay que decir siempre perdóname, te amo, gracias por escucharme, porque no he sabido gestionar mis problemas. Hay que aprender a amarnos a nosotros mismos, porque eso produce una alta vibración, y si tenemos esa vibración alta no vamos a enfermar porque estamos respirando con nosotros mismos, aceptamos que el problema que vivimos no nos gusta, pero hay que asumirlo para poder transmutarlo.

Tenemos que asumir la responsabilidad de que lo que nos sucede no es la culpa de otros

Exacto, porque en algo estoy fallando y no he logrado esa armonía. Entonces lo que nosotros damos son terapias muy bonitas que realmente lo podemos comprobar, y decimos que así como el 99.9% de la enfermedad está creada por el humano, también decimos que el 99.9% eres tú tu propio sanador.

Hay que tratar de ser felices siempre

¿O sea, ni nosotros pusiéramos más en práctica palabras como amor, gracias, perdón, cómo cambiaría el mundo?

Son palabras básicas y simples. El Ho’oponopono es una palabra que fue creada en Hawái y allí siempre repetían esa frase, nosotros la hemos traído y hemos desglosado, y hemos podido comprobar que es amor puro. He visto sanaciones trabajando con esta técnica, con esas palabras simples, pero sabias. Es hermoso, por ejemplo, conectar con la Pachamama, que nos ha dado todo: el alimento, la medicina y los animales que son seres de segunda dimensión que también conectan.

¿Según usted, hablarle a las células es lo más hermoso que podemos hacer cuando queremos sanar?

Doy fe de ello, las células siempre están esperando de ti esa transformación interior, el decir estoy aquí, mírame; pero muchas veces nos vamos hacia afuera y decimos estoy enfermo, por qué me está pasando esto. Somos creadores y cocreadores, y para entrar en el equilibrio que tú quieres, hay que tener actitud, acción, intención, lo importantes es que se puede.

¿Qué mensaje le dejaría a las personas para mejorar su vida diaria?

El mensaje central es que cada día de tu vida sea el mejor día de tu existencia. Si uno se programa en ese sentido y lo decretas cada día, tus células y tu yo interior te abrazarán con tus actos, todo vendrá para ti, desde la buena fe, desde la buena energía, y desde las vibraciones que estás emanando. Seamos felices, estamos de paso en la tierra, el tiempo es muy corto y hay que vivir desde el amor.