Convencido de que la intención de voto a su favor va en aumento, el candidato a la gobernación de Lambayeque por Juntos Por el Perú, Yehude Simon Munaro, resalta los logros que en sus dos administraciones se alcanzaron para el departamento y remarca que sí o sí irá a segunda vuelta. En ese escenario se ve disputando el triunfo con un viejo conocido suyo, su exaliado Anselmo Lozano Centurión, postulante de Podemos Por el Progreso del Perú.
La participación de Simon Munaro en el presente proceso electoral ha sufrido más de un incidente. Primero, su inscripción fue rechazada de manera tajante por el Jurado Electoral Especial de Chiclayo en atención a la ley que prohíbe la participación en elecciones de sentenciados por terrorismo. Tuvo que recurrir al Jurado Nacional de Elecciones – JNE, en apelación para demostrar que la restricción no podía aplicársele por cuanto había sido sentenciado por error judicial y luego indultado. La instancia superior le dio la razón y ordenó que se dé trámite a su inscripción.
Después, cuando estaba próximo a respirar tranquilo, un ciudadano de Amazonas presentó una tacha en su contra, la misma que fue desestimada hasta que el propio ente electoral de Chiclayo le abrió un proceso de exclusión por supuestamente no haber declarado bienes y propiedades que poseía. Superados todos estos inconvenientes, Yehude Simon intenta recuperar espacio y convencer al electorado que en menos de 20 días acudirá a las urnas para elegir.
RECUERDO DE SU GOBIERNO
“Hubo intención de sacarme de la carrera electoral por parte de Javier Velásquez y Héctor Becerril. Trataron de confundir a la opinión pública y por casi tres meses algunos medios de comunicación hicieron eco de que no iba a ser candidato. Eso afectó. Mucha gente tuvo duda y prácticamente en un mes hemos repuntado en la preferencia electoral. Si no estamos en el primer lugar, estamos en el segundo”, refiere el candidato a la gobernación de Lambayeque por Juntos por el Perú.
Indica que la población recuerda cuáles han sido sus obras y gestiones del tiempo en el que ocupó la presidencia de Lambayeque, destacando la ejecución del Hospital Regional, del Proyecto Olmos, de los puentes a Cañaris, de la carretera a Monsefú y la vía que une desde Zaña a Oyotún.
“Muchos lo recuerdan, sobre todo los maestros con los que tanto trabajamos y más aún el mundo andino. Yo no necesito gastar millones en campaña, la gente me conoce. Soy una especie de marca con la que se puede identificar a Lambayeque”, asevera.
Sin corrupción
“Cuando nosotros fuimos gobierno lo primero que hicimos fue firmar un acuerdo con Transparencia, lo que nos sirvió de base para recibir durante siete años el premio al gobierno regional más exitoso y libre de corrupción a nivel nacional. Precisamente por esa experiencia fui llamado a ser presidente del Consejo de Ministros, porque se demostraba que llegaba un hombre transparente”, indica el candidato.
Agrega que tras culminar su mandato como presidente regional no fue denunciado por hechos de corrupción y que no ha afrontado ningún proceso por manejar de manera irregular los recursos del Estado.
“Pese a que algunos intentaron o intentan manchar mi honra, al señalarme como corrupto por el Proyecto Olmos, se han equivocado de cabo a rabo. No tenemos absolutamente ninguna denuncia y tampoco ningún temor”, manifiesta.
RESULTADOS DE OLMOS
El aspirante a la gobernación de Lambayeque, en cuya administración regional se inició la ejecución del Proyecto Olmos, destaca que los resultados de este proyecto de irrigación son importantes “y no pueden ser desmerecidos por sus oponentes”.
“Gracias a Olmos el año pasado el Estado recibió 120 millones de dólares por impuestos. Seguramente la empresa que construyó Olmos le jugó mal al país en otros proyectos, pero con Olmos hoy en día el Estado Peruano está recibiendo ganancias”, sostiene.
Niega haber recibido algún tipo de ayuda económica o favor de parte de Odebrecht, concesionaria de las fases de trasvase e irrigación del Proyecto Olmos a través de sus subsidiarias.
“Yo gané mi primera elección cuando Odebrecht no estaba en Lambayeque y la segunda por los éxitos que habíamos alcanzado. Lo que sí es cierto es que al igual que las demás autoridades y actores sociales de Lambayeque me he reunido con sus representantes, incluso en actos públicos como las cenas empresariales que organizaba el gobierno regional para promover las inversiones”, refiere.
SEGUNDA VUELTA
Simon Munaro asegura que de todos modos habrá segunda vuelta en la elección regional, más aún porque la existencia de 14 candidaturas dispersa el voto, por lo que será difícil que cualquiera de los postulantes logre más del 40 % de adhesiones el próximo 7 de octubre para ganar de manera directa la gobernación de Lambayeque.
El líder de Juntos Por el Perú reconoce también que varios de sus contrincantes tienen “un voto duro”, lo que hace todavía más complejo el escenario electoral.
“Podemos Perú es un partido que si bien fue mal inscrito, tiene los recursos y Anselmo Lozano es un candidato que tiene cierta presencia. Por otro lado, Alianza Para el Progreso, a pesar de no haber hecho un gobierno como los lambayecanos esperaban, también tiene capacidad de organización y mucho dinero para hacer campañas”, menciona.
Eso sí, aclara que su apreciación le impide considerar que Alianza Para el Progreso sea un partido político.
“No es un partido político, es una empresa. Hay que decirlo sin ofender a nadie: es una empresa familiar y con mucho dinero. Ellos tienen organización empresarial, con muchos alumnos y muchos empleados, con sueldos, lo que los diferencia de partidos como el nuestro en los que no hay empleados sino militantes. Son, entonces, grandes diferencias”, señala, añadiendo que otra de las agrupaciones con votación sólida es Fuerza Popular, pese a las dificultades y pérdida de legitimidad que atraviesa.
Refiere que se ve en una eventual segunda vuelta compitiendo con Anselmo Lozano Centurión, candidato de Podemos Por el Progreso del Perú.
“Él corrió solo durante cuatro o cinco meses, tiene muchísima economía y aunque parezca mentira, pese a que la ley lo prohíbe, su partido ha hecho muchísimo clientelismo”, menciona.
RECUPERAR LAMBAYEQUE
Simon Munaro pide el respaldo de los electores remarcando que su administración regional entre el 2003 y el 2010 dio resultados tangibles para el departamento y se caracterizó – asegura – “por la transparencia y eficacia de los funcionarios”.
“Tenemos que recuperar a la región Lambayeque. Nuestra época fue la mejor y ocupamos siempre los primeros puestos a nivel nacional. No había un solo peruano que no reconociera los avances que se lograban en la región y ejecutamos las obras que la población reclamaba por décadas: Olmos, el Hospital Regional, las carreteras y los puentes. La gente sabe que fuimos muy honestos, que fuimos honrados como correspondía, que no traicionamos al pueblo lambayecano”, sostiene.
Por otro lado, sobre la reciente sentenciada de cadena perpetua dictada por la justicia peruana a la cúpula senderista por el caso Tarata, Simon Munaro señala que no cabía otra decisión de parte del Poder Judicial.
“El conflicto armado que vivió el Perú, que significó más de 60 mil muertos, el destrozo que se hizo de la economía nacional y sobre todo el daño a las personas, merecía un castigo bien severo. No es venganza, es justicia, y a ellos tenía que aplicarse todo el peso de la ley en toda la extensión de la palabra. Aún hay muchas personas que exigen justicia porque no se cicatrizan las heridas. La sentencia a la cúpula senderista era lo normal, lo ético y el Poder Judicial ha actuado como correspondía”, asevera.
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