El coordinador de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza, Luis Montenegro Serquén, manifiesta su preocupación por el aumento en el índice de anemia en Lambayeque y señala que son las autoridades locales quienes deben mejorar las condiciones de vida en sus distritos para contrarrestar este mal.
Ante el aumento de la anemia a nivel nacional, la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza promueve el diálogo entre las autoridades y los diferentes actores de la sociedad para reducir las cifras que en Lambayeque llegan hasta el 41.7 % y en algunas zonas como Incahuasi bordean el 70 %, según refiere el coordinador.
Para la Organización Mundial de la Salud – OMS, “la anemia es una condición en la cual el contenido de hemoglobina en la sangre está por debajo de valores considerados normales, los cuales varían con la edad, el sexo, el embarazo y la altitud. Entre las causas de la anemia son variables; entre éstas se incluyen: la pobre ingesta diaria de macro y micronutrientes, la excesiva pérdida de sangre, la destrucción de los eritrocitos y el incremento de los requerimientos durante ciertos estadios de la vida. Los nutrientes más frecuentemente involucrados en su etiología son: el hierro, el ácido fólico y la vitamina B12 Recientemente, se han señalado otros nutrientes como el ácido ascórbico, la piridoxina y la vitamina A, cuya deficiencia coadyuva la condición de anemia”.
Luis Montenegro sostiene que la anemia es un problema “ético”, pues involucra el compromiso de toda la sociedad en su conjunto, pero especialmente de los alcaldes, “quienes deberían olvidar los colores políticos y trabajar articuladamente para disminuir la pobreza” y, en consecuencia, la anemia.
Según el Plan Multisectorial de Lucha contra la Anemia impulsado por la Secretaría Técnica de la Comisión Interministerial de Asuntos Sociales del Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social – MIDIS, el alcalde debe liderar todas las actividades de las Instancias de Articulación Local, apoyado por los gestores territoriales del MIDIS, operadores de servicios, promotores de desarrollo social de la comunidad, la sociedad civil organizada, el sector privado y la academia.
“Es cierto que la anemia no reconoce de estratos sociales. Puede producirse por motivos intrínsecos como alguna enfermedad crónica u hereditaria, pero la mayor parte de los casos se debe a factores extrínsecos relacionados a la pobreza como una mala alimentación o falta de acceso a servicios básicos como el agua, por eso los alcaldes deben liderar esa lucha”, señala.
En ese sentido, asevera que muchos distritos de Lambayeque no cuentan con acceso a agua potable como Mórrope y Pacora, motivo por el cual desde la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza, en coordinación con la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, se realizó un estudio de calidad del agua de Mórrope y en los próximos días se aplicará el mismo estudio en Pacora.
Montenegro Serquén asegura que otras causas extrínsecas son no lavarse las manos o comer los alimentos sin lavar. Esto genera que los niños tengan parasitosis, cuya consecuencia directa es la anemia. No obstante, refiere que si no existe saneamiento básico, por más que se tenga una correcta higiene, es posible que se presenten casos de parasitosis.
EMBARAZO ADOLESCENTE
Por otro lado, anota que el alto índice de embarazo adolescente en la región (19 %) repercute también directamente en el aumento de la anemia, pues a los 13 o 14 años existe una mayor probabilidad de que el niño nazca con anemia. Además, señala, una madre gestante en situación de pobreza que padece anemia, con seguridad también tendrá un niño con anemia.
“Toda adolescente es una potencial madre, por eso debemos trabajar con ellas desde los 11 años y hacerles tamizajes de anemia. Lo ideal sería que no haya ninguna mujer embarazada antes de los 20 años, edad en la cual ya se ha desarrollado y tiene mayores oportunidades de darse una mejor calidad de vida, tanto ella misma como a sus hijos”, explica.
Asimismo, indica que toda madre adolescente gestante debe recibir los controles protocolares de salud, los cuales incluyen el control de anemia, tal como se señala en el marco del Plan Nacional para la Reducción y Control de la Anemia Materno Infantil y la Desnutrición Crónica Infantil en el Perú.
Señala también que un niño que logra superar los tres primeros años tiene más posibilidades de desarrollarse que uno que vivió con anemia en los primeros mil días de infancia, por lo cual es importante que el sector salud, en coordinación con el Ministerio de Desarrollo e Inclusión social, entregue desde los cuatro meses suplementos nutricionales de hierro a los menores. “Un niño sin anemia posiblemente sea un ciudadano exitoso”, afirma.
En ese sentido, manifiesta que se está construyendo el Plan Educativo Nacional al 2036, a través del cual debe llevarse un mensaje claro de lucha contra la anemia desde las aulas, que involucre a profesores, padres de familia y alumnos en esta cruzada.
REUNIÓN CON LAS AUTORIDADES
Montenegro Serquén señala que hasta el momento como organización han sostenido dos reuniones con el acalde de Chiclayo, Marcos Gasco Arrobas, y con el gobernador regional, Anselmo Lozano Centurión, con quienes ya se ha tocado la problemática de la anemia y existe aparente buena voluntad de trabajar articuladamente.
“La Mesa de Concertación es un espacio de diálogo, no de fiscalización. Nosotros no estamos para criticar a las autoridades, estamos para ayudarlas, pero para eso es importante que los canales de diálogo no se cierren”, exhorta.
Deja tu Comentario