La gestión de Aldo Zapata López como presidente de la Corte Superior de Justicia de Lambayeque está próxima a culminar y en unos días los jueces superiores se encargarán de elegir a quien lo reemplazará en el cargo.
Sin duda, la decisión de los magistrados será crucial considerando que la administración de Zapata López no ha estado libre de cuestionamientos, sobre todo por lo referido al manejo administrativo de la Corte y las contrataciones de personal CAS, con selecciones que han dejado más de una duda en cuanto a su desarrollo.
Así pues, resulta fundamental que quienes aspiran llegar a la presidencia de la Corte de Lambayeque tengan la oportunidad de dar a conocer cuáles son sus propuestas, a fin de analizarlas y generar el debate entre los miembros de la judicatura y la comunidad en general para saber si responden o no a las necesidades del sistema de justicia en el departamento.
Siendo así, saludo la carta que el 26 de noviembre dirigió el juez superior Ismael Rodríguez Riojas al despacho de Zapata López, solicitándole que convoque a Sala Plena para que los candidatos a la presidencia de la Corte y a la jefatura de la Oficina Desconcentrada de Control de la Magistratura den cuenta de sus planes de gestión para el período 2019 – 2020.
“La hora actual y la problemática institucional confrontada en los últimos meses a nivel nacional, y la alta responsabilidad de dirigir los destinos de una Corte Superior de Justicia, exigen que los señores jueces superiores que – en ejercicio de su legítimo derecho – aspiran a los mencionados cargos, hagan público y sustenten ante sus colegas jueces superiores titulares sus planes de gobierno y trabajo, en expresión de respeto a la Sala Plena y de ejercicio democrático que ponga de manifiesto la planificación con la cual estiman dirigir nuestra corte superior”, señala la misiva de Rodríguez Riojas.
El juez indica que su pedido se justifica en que se trata de un proceso de elección serio y de trascendencia para la judicatura y, por lo tanto, en respeto a la majestad del Poder Judicial y de los que conforman la Sala Plena, los señores jueces superiores que van a formular candidaturas están en el deber moral de sustentar ante sus pares de la Sala Plena sus planes de gobierno y de trabajo.
“La responsabilidad de dirigir una Corte Superior amerita que quien aspire a cumplir ese encargo lo haga tras haber efectuado el profundo y cabal estudio de la problemática y haya esbozado un plan de gobierno con objetivos reales, viables propuestas de solución y metas claras. Hasta la fecha no se conoce oficialmente candidaturas, menos planes de trabajo”, precisa en el escrito.
Es de mencionar que la Ley Orgánica del Poder Judicial no contempla la obligación de dar a conocer planes de gobierno para quienes presentan su candidatura a la presidencia de la Corte Superior y a la jefatura de la ODECMA. Sin embargo, como bien señala Rodríguez Riojas, ello no impide a que el actual presidente de la Corte de Lambayeque atienda el pedido.
Como anota también el juez superior, es necesario tener en cuenta que la Corte Superior de Justicia de Lambayeque tiene la condición de unidad ejecutora y, por lo tanto, tiene el manejo de su presupuesto institucional, el que para este año fue de 75 millones 520 mil 823 soles.
Asimismo, la Corte de Lambayeque tiene una importante estructura conformada por 122 órganos jurisdiccionales y un total de mil 139 servidores, entre magistrados, auxiliares judiciales y administrativos.
“No olvidemos que los tiempos actuales demandan que quienes aspiran a dirigir instituciones públicas, más aun aquellas conformantes de un poder del Estado, lo hagan premunidos de un plan de acción o de un plan de gobierno en prueba de la preparación y planificación que exige la administración pública moderna”, concluye Rodríguez Riojas.
Hago mías las palabras del juez superior y ojalá el presidente de la Corte de Lambayeque tome la acertada decisión de convocar a la Sala Plena para que los candidatos a sucederlo en el cargo expongan sus propuestas.