“Nuestra relación ya no es la misma, pues hace meses que ya no tengo ganas de estar con mi pareja o simplemente no tengo interés por el sexo”, este es quizás algunos de los casos que suelen darse en las parejas.

Algunos consideran que esto suele darse porque ya no hay amor en las parejas, se terminó el gusto y el cariño. Sin embargo ésta pérdida de interés por el sexo puede deberse a otros factores y no solo a la “falta de amor”.  

Quizás pocas veces hemos oído hablar acerca de la anorexia sexual, un trastorno relacionado con un bajo interés de tener sexo. Es parte de los trastornos del deseo como la aversión al sexo. Y según estudios recientes lo padecen cuatro de cada diez mujeres y tres de cada diez hombres.

También se le conoce como “Anafrodisia” o “deseo sexual inhibido” en el cual una persona no comenzará ni responderá al deseo de actividad sexual en la pareja.

Las causas de este rechazo a tener relaciones sexuales son físicas y psicológicas. Mayormente, suele tratarse de miedo a que el individuo sea rechazado por la pareja. Además, uno de los dos siente que no tiene ningún atractivo físico y, por lo tanto, presenta una baja autoestima. No es sólo que se prohíba a sí mismo comunicar que desea tener sexo, sino que se niega disfrutar del placer o de tener una relación amorosa.  Asimismo, el cuerpo pierde sensibilidad y todo estímulo para excitarlo es traumático y repulsivo.

La anorexia sexual se relaciona con depresión, hipotiroidismo, trastornos obsesivos, o trastorno por estrés postraumático, violación, cirugías mamarias o de otra región corporal, incluso abuso de alcohol.

La conducta social de esta persona es de evitar todo tipo de contacto o acercamiento que dé oportunidad de tener sexo. Lo que suele hacer es acostarse más temprano, centrarse sólo en las relaciones con familiares o amistades.  

Es importante evitar los pensamientos negativos que intervienen en el momento íntimo e impiden tener fantasías sexuales. Se puede usar técnicas de relajación y respiración para tener control de la ansiedad.

También pueden ayudar las caricias, masajes, baños con la pareja hasta lograr la sensación de plenitud y placer. Ello se debe de acompañar con bastante diálogo entre el hombre y la mujer.

Si detectamos  algunos de estos factores en nuestra pareja es necesario acudir con un especialista y tratar este problema. No dejemos que la falta de interés sexual termine con el verdadero amor, porque si tu pareja te quiere realmente te entenderá y sobre todo te ayudará.