Luis Montenegro Serquén, químico farmacéutico de profesión, excoordinador y miembro nato de la Mesa de Concertación para la Lucha Contra la Pobreza, explica su visión sobre los servicios de salud, educación y el desarrollo que se da en el departamento y a nivel nacional con la aplicación de los programas sociales.
Es miembro de la mesa desde su fundación en el 2001, y ha contado con la información y la tarea de apoyar a instituciones como municipios y el Gobierno Regional de Lambayeque en desarrollar diferentes estrategias en beneficio de la sociedad, pero, sobre todo, luchando siempre por la equidad y la intersectorialidad que considera tan importante para el cumplimiento de todas las dimensiones de desarrollo.
SALUD Y POBREZA
Un indicador de pobreza que considera fundamental es la salud, pues es un aspecto básico que influye tanto en el crecimiento como en el proceso cognitivo de los niños, siendo la desnutrición crónica uno de los problemas principales que se desenvuelve en las zonas más vulnerables de Lambayeque.
“En esta dimensión social, tenemos la tarea de ver que los nutrientes dados por el Estado sean entregados, las vacunas, las inscripciones en el SIS se cumplan, vigilar que el desayuno que se les brinda cuente con los alimentos necesarios para acabar con este mal de la desnutrición”, explica.
Se sabe que enfermedades como la anemia disminuyen en dos puntos el coeficiente intelectual de los más pequeños, y aunque se ha logrado reducir un porcentaje en la población, aún hay zonas rurales que son afectadas.
“Un niño con anemia no entiende lo que lee, esto se refleja en la evaluación del proyecto educativo, donde observamos cómo el 81 % de los niños tienen esta dificultad y el 90 % no es capaz de resolver una operación lógico matemática, según los resultado del 2001. Entonces, estamos partiendo de niños que por su pobreza se están quedando atrás”, explica Montenegro Serquén.
En las zonas rurales como Cañaris la pobreza afecta al rededor del 90 % de la población y en Incahuasi el porcentaje es del 80.3 %.
“La pobreza se refleja cuando vemos niños que salen a trabajar en las calles en vez de ir al colegio, entonces estamos criando a los mismo pobres de siempre. El hijo del pobre seguirá siendo pobre y se hace una cadena generacional, donde la pobreza continúa. Para cortar esta brecha debemos trabajar todos, el Estado solo no va a poder, puede tener la intención pero todavía hay corrupción en los programas sociales, por ejemplo”, afirma.
En el caso de programas como Qaliwarma, donde se les brinda a los niños los nutrientes necesarios para su desarrollo, el indicador de resultado es por cobertura, es decir que se señalan los gastos y las inversiones de cuántos desayunos se repartieron, pero la pregunta que se hace Luis Montenegro es si con ello se ha disminuido la desnutrición.
“En el programa solo se ve el punto de vista de dar, no vemos el resultado que son los niños nutridos, no vemos qué el porcentaje de niños que no entendía se haya reducido, lo que sí es un indicador importante de desarrollo. Si comparamos los gatos de cobertura con el indicador de resultados, tendríamos que cuestionarlo, y esa era la pregunta que se hacía la mesa”, comenta.
En el 2007 Montenegro Serquén realizó una visita a Mórrope, donde al exigir las partidas de nacimientos y dirección de los niños inscritos en el programa de alimentos pudo darse cuenta que muchos no existían, otros niños que supuestamente tenía tres meses, en realidad tenían 12 años, es entonces que se dio cuenta de la falta de control imperante.
“Si se aplicara la norma se darían las sanciones correspondientes. Se debe trabajar con herramientas y la verdad, generando confianza, en donde todos los actores participen, pero no solo seleccionando proyectos, sino priorizando lo que más necesita un distrito, como es el agua y el desagüe, en lugar de hacer casas o construir veredas”, indica.
Otra de las enfermedades que más afectan a la población en situación de pobreza es la parasitosis, la cual es consecuencia de la falta de servicios de saneamiento en las zonas rurales.
“Por otro lado, la madre gestante de las zonas alejadas no tiene un camino fácil para llegar a los centros de salud y debe dar a luz en lugares donde se corre el riesgo de una mala práctica que puede poner en riesgo su salud y la del bebé, es por ello que desde la mesa proponíamos que se crearan lugares donde las mujeres puedan estar durante los últimos 15 días de gestación bajo la atención de profesionales”, cuenta.
CORRUPCIÓN Y EDUCACIÓN
“La corrupción es una línea que afecta todas las dimensiones de desarrollo, incluso de los actores mismos. Este tema se encuentra muy enraizado en el Poder Judicial, en el Jurado Nacional de Elecciones, y en más de una institución gubernamental”, asegura.
Montenegro Serquén considera que la pobreza en el país se encuentra maquillada, afirma que todos los gobiernos quieren indicar que se disminuye el porcentaje de pobreza. Sin embargo, esto no se refleja cuando se ve que 20 de cada 100 niños trabajan y que hay analfabetismo en la población.
“En Lambayeque la cifra de analfabetismo se ha reducido en un 7 %, pero en pueblos como Incahuasi el 80 % de las mujeres son analfabetas y el 50 % de los hombres están en la misma situación. Sigue existiendo un machismo que detiene el crecimiento de las mujeres”, especifica.
La intersectorialidad consiste en que cada ministerio o departamento del Estado conozca las funciones de los otros, para que de este modo exista el apoyo mutuo y no se gaste diferente dinero en una misma acción.
“Hoy en día tenemos programas que han sustituido otros programas como el Wawasi con Cuna Más, cada gobierno va poniendo sus propios proyectos, tienen buenas intenciones y algunos son modelos de países como México y Brasil. Pero en estos programas sociales debe haber un seguimiento”, explica.
Asimismo, Montenegro Serquén refiere que el Ministerio de Salud no tiene injerencia en el desarrollo de Vaso de Leche, por ejemplo, y solo se encarga de medir la desnutrición, no puede reclamar si este no da resultados. Sin embargo, considera importante la presencia de una intervención por parte de personas especializadas que puedan rendir cuentas sobre los resultados en cada localidad.
“Si bien se dice que en los últimos años el país a atravesado por un crecimiento económico, esto puede deberse a la presencia de empresas extranjeras y el aumento de tarjetas, que generó un movimiento económico fuerte, pero me temo que deben haber personas que ahora están endeudadas y se les está quitando bienes, y eso solo empobrece más a la gente”, comenta.
El crecimiento económico del Perú hasta el 2013 sobrepasó incluso a países como Chile con un porcentaje de 7.5 %, aunque a la fecha se ha reducido a un 3. 5 %, aproximadamente. Según el Fondo Monetario Internacional se pierden cerca de dos mil millones de dólares en corrupción en países emergentes.
Por otro lado, en el factor educativo como indicador de pobreza esta la ausencia de los niños en las escuelas. En Lambayeque alrededor del 20 % de niños en edad escolar no asiste a clases.
En el 2004 se construyó el Proyecto Educativo Regional que arrojó estas cifras al inicio. No obstante, a la fecha el rendimiento de los jóvenes no han sido indicadores de un buen resultado y aún existe un porcentaje que no asiste por falta de recursos.
“Hace un tiempo el mejor resultado en matemática a nivel nacional fue de unos niños de una escuela rural. Existen las excepciones, pero queremos que sea la mayoría los que tengan esa oportunidad de desarrollo, no podemos esperanzarnos solo en una o dos personas de un grupo de 100”, enfatiza.
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