Por estas fechas el Mercado Modelo se convierte en un foco importante de compra ´ venta. Los comerciantes esperan alcanzar una importante cifra de venta, mientras que los usuarios buscan encontrar una variada oferta. Esta campaña navideña, como todas las anteriores, viene cargada de muchos deseos de llegar a casa con una ofrenda para colocarla sobre la mesa. Sin embargo, el factor económico es siempre la disyuntiva que enfrenta el ciudadano. No todos tienen la misma capacidad adquisitiva, pero sí los ánimos para celebrar una navidad llena de alegría en unión familiar. Los comerciantes del principal centro de abastos esperan para esta campaña navideña incrementar sus ventas hasta en un 80%. Desde la adquisición de artículos de primera necesidad como el infaltable chocolate, leche, panetón, y demás víveres de pan llevar hasta los regalos para los pequeños de la casa como juguetes y ropa, son los que se espera expender por estas fechas. Los que gusten de tomar este centro de abastos como alternativa para sus compras navideñas podrán encontrar en los diferentes puntos del perímetro del mercado diferentes opciones de compra de acuerdo al presupuesto de cada persona. Uno de los más solicitados es la plataforma Arica, donde a sus alrededores se pueden observar centenar de comerciantes de calzado deportivo, casual y formal. Un detalle importante es que siempre en campañas navideñas aparecen novedades no ajenas a la moda. En esta oportunidad los colores, acabados y detalles dan la hora en la ropa para niños donde nunca faltan las imágenes de los personajes conocidos de la televisión. Por estos mismos lares, pero en la afueras de mercado, abundan los comerciantes ambulatorios y galerías que buscan conseguir tantos compradores como sean posible, para esto se ayudan del perifoneo ensordecedor y jaladores a las afueras de las tiendas comerciales que con celeridad y marketing comercial enamoran al comprador para que acceda a entrar a su tienda a chequear sus productos y, por supuesto, salga con la bolsa cargada. Igualmente, las aceras de la calle Arica y avenida Balta están copadas de comerciantes que aprovechan estas fechas para hacer su agosto con la venta de adornos navideños. La venta de estos accesorios no tiene pierde entre los comerciantes debido a que todos los años las familias adquieren las infaltables guirnaldas, luces, pasto, estrellas, tarjetas, árboles y demás enseres que acompañan el ambiente navideño. Otros que aprovechan esta campaña son los vendedores de ropa interior, y aunque no es precisamente este mes cuando se instalan, sino que permanecen durante todo el año; muchos de ellos acomodan su mercadería sobre plásticos y esperan pacientemente que se acerquen los clientes. Ya sobre el final del año este rubro tendrá más demanda y atraerá la atención de quienes quieran cumplir alguna cábala como la compra de prendas amarillas. Pérdidas navideñas El principal centro de abastos de Chiclayo está integrado aproximadamente por 10 mil comerciantes entre formales e informales. Casi la totalidad de sus integrantes coinciden en que los últimos años han decrecido sus ventas, perjudicando seriamente su economía. Esto se debería principalmente a la aparición los grandes centros comerciales como Real Plaza, Saga Falabella, Open Plaza, Ripley. Además, hay que tener en cuenta que en los próximos meses se inaugurarán otras más. Si bien para el común de los ciudadanos la aparición de estos centros comerciales en nuestra ciudad ha traído muchos beneficios, para los comerciantes ha significado que sus ventas decrezcan hasta en 40%. Aún así, los comerciantes se muestran entusiastas con las ventas que puedan obtener en estas fiestas navideñas, la cual permite que los ingresos se incrementen aproximadamente en un 80%, básicamente por las ventas que se realice en la semana anterior al 25 de diciembre. Sin seguridad Si se quiere atraer a una gran masa de compradores a este centro de abastos tiene que ofrecerse seguridad y orden que garantice al consumidor comodidad al realizar sus compras. Sin embargo, en este recinto son conocidos los casos de delincuentes al paso, trayendo desazón entre los comerciantes y clientes. En este sentido, el Secretario General del Sindicato de Comerciantes Minoristas del Mercado Modelo de Chiclayo, Aníbal Ravines Malca, mostró su preocupación por cuanto la Policía Nacional no brinda la seguridad adecuada en el recinto comercial. Asimismo, muestra su queja contra las autoridades de la Municipalidad Provincial de Chiclayo, quienes no se preocupan en brindar seguridad a los mercados de pueblo. "Diferente es la realidad en los centros comerciales de grandes capitales, donde las autoridades locales ponen a disposición efectivos policiales armados para custodiarla de cualquier extraño con malas intenciones", asevera. Ravines Malca confiesa que los dirigentes de los gremios se han visto en la necesidad de contratar seguridad particular, solventada con el aporte de los contribuyentes; no obstante, esto tampoco es suficiente debido a que los efectivos de seguridad del Mercado Modelo non están uniformados y cuentan como única arma represiva un palo que no atemoriza a los facinerosos. "Agradeceríamos que la municipalidad se digne en designar un par efectivos se serenazgo para vigilar el interior del Mercado Modelo, lo mismo la Policía Nacional que con cuatro policías es impensado que puedan resguardar este mercado de 10 mil comerciantes", reclama el secretario general, dando cuenta que han solicitado al general de la policía Víctor Ordinola Ruiz la designación de 15 efectivos policiales más para que recorran los pasillos del centro de abastos, recibiendo como respuesta la negativa del petitorio, aludiendo falta de presupuesto. La autoridad sindical refiere que para la presente campaña navideña esperan que la autoridad municipal ponga mano firme y mantenga el orden en las calles Arica en cuyas aceras debe resguardarse el orden y evitar tugurizar el Mercado Modelo con la instalación de puestos de venta ambulatoria. Cortarán dedos y los pasearán calatos Por su parte, el presidente de la Asociación de Comerciantes Minoristas de este mercado, Teodoro Custodio Cachay, hace un llamado a las autoridades locales para que brinden seguridad. Éste hace notar su disconformidad con el proceder de las autoridades fiscales que ponen en libertad a los delincuentes que son capturados en el interior del mercado por uno de los 50 ronderos que recorren los pasillos del centro de acopio. Debido a que por estas fechas la delincuencia se acrecienta, Custodio Cachay señala que han creído oportuno implementar el servicio de vigilancia contratando 20 ronderos más para que se ocupen de la vigilancia. Sin embargo, el dirigente sindical señala que ante la insistencia de los malhechores se han visto obligados a actuar con firmeza, por lo que han optado pasear desnudos a quienes logren capturar. Mostrándose aún más rigurosos con los castigos, agrega que si el facineroso es reincidente procederán a cortarle uno de los dedos de la mano lo cual sería una buena reprimenda para quienes intenten actuar de mala voluntad en este mercado; aunque claro está, esta medida podría acarrear graves problemas legales para la Asociación y sus integrantes. Esperan una buena navidad En el Mercado Modelo hay varios comerciantes con muchos años trabajando allí. Uno de ellos es José íÂ�valos Rodríguez, quien durante 60 viene dedicándose a la venta de ropa. Cuenta que a diferencia de años anteriores las ventas han disminuido considerablemente. "Años atrás la gente compraba en grandes cantidades, ahora apenas reciben un sueldo que alcanza sólo para comer. Por estos días muchos acuden acá, pero sólo miran, preguntan y siguen su recorrido. Además, la aparición de supermercados nos ha afectado considerablemente", confiesa el comerciante que en años anteriores su puesto de venta de ropa estaba surtido de camisas, pantalones, casacas, etc., sin embargo, ahora sólo le queda un reducido puesto con apenas unas decenas de camisas. Parecida realidad la que vive Elena Fernández, quien por más de 35 años viene dedicándose a la venta de vestimenta para todo género y edad. Ella también comparte la idea que actualmente las ventas por campaña navideña no son las mismas de antes, acusando a la inseguridad y aparición de centros comerciales. Solicita la comerciante que, al igual que el año pasado, la playa de estacionamiento de mercado quede accesible para el libre tránsito de los que llegan a comprar, debido a que el copamiento por parte de los ambulantes restringe la llegada de clientes hacia sus puestos. De igual forma pide a las autoridades municipales resguarden el orden en las aceras de calle Balta por la misma razón. Otros comerciantes como Elmer Arteaga o Marilú Medina piensan que el Mercado Modelo tiene sus clientes asegurados los cuales provienen de zonas marginales y pueblos jóvenes. Ellos aseguran que hay mercado para todos, además afirman no tener nada que envidiar a los centros comerciales, pues aseguran vender ropa de buena calidad hechas en nuestro país, a diferencia de las confecciones chinas y de mala calidad que se expenden en los centros aludidos. "La gente acude a esas tiendas sólo por una cuestión de moda, además lo pueden solventar con tarjetas de crédito", aseguran.