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Columnista - Semanario Expresión

Estudiante de Ciencias de la Comunicación - UNPRG

 

PARA TI, AURICH

Escribe Sergio Daniel Odar Arias para la edición N 980

«Aunque nos falte el tomate y escaseen más las papas, y el viernes no haya “caniche”, aunque falte; que se hagan feas las guapas, con tal que gane el Auriche.

Aunque el agua venga turbia y la luz sin su voltaje, aunque renuncie Rumiche, como agricultor sin lluvia; aquí nos sobra el coraje cuando golea el Auriche.»

 

Palabras del gran Nicanor de la Fuente Sifuentes, más conocido como “Nixa”. Palabras dedicadas al Juan Aurich. Palabras de un muy destacado escritor que, sin ser chiclayano de nacimiento, llegó a amar esta bella ciudad y se hizo hincha del equipo norteño. Y es que ¿cómo no ser hincha de un club que sin necesidad de ser capitalino tiene seguidores en todo el Perú? Y en la actualidad, ¿cómo no ser hincha del único equipo peruano que le ganó y eliminó a su similar mexicano en tierras aztecas? Sin lugar a dudas, un verdadero orgullo para el país.

 

La emoción con la que estoy escribiendo esta columna no se compara con las anteriores. No puedo ocultar mi hinchaje aurichista. He leído tanto, me he informado tanto, tengo tantos datos de mi Aurich que no sé exactamente por cuál empezar. Para quienes no están enterados, el sábado 03 de septiembre se cumplieron 94 años desde la fundación del “Auriche”, como lo llamaban los campesinos lambayecanos. Fue en 1922 que un grupo de trabajadores de la hacienda de Batán Grande acuerdan conformar un equipo de fútbol y lo bautizan como Juan Aurich, en honor al propietario de la hacienda, don Juan Aurich Pastor. Ellos jamás imaginaron que era el inicio de una gran historia.

 

Una gran historia que tiene de todo: alegrías, tristezas, enojos, triunfos, derrotas, ilusiones, lágrimas, enseñanzas, etc. Una gran historia que convierte al Aurich en el equipo emblema de Chiclayo y referente del norte. Sí, bajó muchas veces, es cierto. Pero nunca pasó desapercibido en los torneos, incluso en épocas de escasez económica peleaba los primeros puestos de la tabla, palmo a palmo, frente a los llamados equipos grandes del país. Y no solamente hacía buenos partidos frente a los capitalinos, todos saben de la antigua rivalidad entre Aurich y Melgar, dos claros pesos pesados de los clubes provincianos. Sin embargo, cabe recalcar que el verdadero clásico no se juega frente a los arequipeños. El eterno rival es el Club Atlético Grau de Piura, el hincha rojo debe tenerlo presente.

 

Tanto por decir. El “Ciclón del Norte” apenas tenía dos años en el fútbol profesional y quedó subcampeón a nivel nacional. Mereció ser el campeón por haber terminado igualado en puntos y con mayor diferencia de goles que Sporting Cristal, pero a última hora cambiaron las bases (lo cual no sorprende hasta la actualidad) y se forzó a un partido definitorio que se jugó en Lima. Fuimos visitantes en la gran final y encima el equipo jugó incompleto por haber terminado la temporada. Igual, con mucho en contra, fuimos el primer equipo de provincia en clasificar a la Copa Libertadores de América. El primero. Un orgullo más en nuestra historia.

 

Somos protagonistas de la primera tragedia en el fútbol peruano, cuando pasó la desgracia en 1953. La emocionante Copa Libertadores que jugamos el 2010 (cuando eliminamos en su casa a Estudiantes Tecos de México). El título nacional del 2011. Una columna no basta, hay tanta historia en este equipo. No obstante, quiero terminar dedicando estas líneas al equipo de mis amores. Noventa y cuatro años brindándole todo tipo de emociones a la “Capital de la Amistad”. Y sé que vienen muchas cosas más. Para el club del cual soy hincha confeso. Para ti, Aurich.

 

SERGIO DANIEL ODAR ARIAS

Sergio Daniel Odar Arias
Fecha 2016-09-23 15:52:38